Las denominaciones de origen gallegas generaron un volumen de negocio de más de 265 millones de euros y dieron empleo directo a más de 62.000 personas en 2008, según representantes de la mayor parte de los consellos reguladores, que se reunieron con el conselleiro de Medio Rural, Samuel Juárez. El conselleiro sostuvo que la política de fomento de la calidad va a seguir siendo un eje fundamental para Medio Rural y destacó la imagen positiva para Galicia que proyectan las denominaciones de origen.
La Consellería de Medio Rural revisará el funcionamiento de los consejos reguladores de las denominaciones de origen (DO) gallegas para solucionar algunas deficiencias que están limitando, en algunos casos, su crecimiento. Así lo anunció ayer el responsable de este departamento, Samuel Juárez, quien explicó que no se trata de una reprimenda, sino de ayudar a las DO para eliminar los problemas que puedan existir. El conselleiro puntualizó que estas modificaciones se analizarán caso por caso, ya que existen muchas diferencias entre las distintas denominaciones.
Juárez, que estuvo acompañado por los representantes de los consejos reguladores de las DO y de las indicaciones geográficas protegidas de Galicia, resaltó la importancia de combatir la competencia desleal y mantener el rigor y la seriedad en el control de la producción. Es fundamental que todos los productores se mantengan dentro de los parámetros marcados para evitar el desprestigio que puede suponer la utilización de las denominaciones de origen de manera no apropiada, señaló.
Calidad y homogeneidad
En este sentido, explicó que, debido al pequeño tamaño de la mayoría de las explotaciones gallegas, el formato de las DO es el único que permite vender estos productos garantizando la calidad con altos niveles de homogeneidad. Por este motivo, aseguró que la Xunta va a mantener su política de fomento de los productos agroalimentarios de Galicia, ya que estas agrupaciones, que el ejercicio anterior facturaron 266 millones de euros, son un importante pilar del medio rural gallego.
De hecho, según los datos de las denominaciones de origen, emplearon directamente a más de 62.000 personas, lo que facilita el asentamiento de población en el medio rural, garantizando, además, una explotación sostenible del medio ambiente. Juárez destacó, además, la importancia de estos productos para promocionar la imagen de Galicia en el exterior como una marca de calidad y prestigio.
Petición de apoyo a la Administración
El presidente de la Denominación de Origen Ribeira Sacra, José Manuel Rodríguez, pidió a la Xunta que no se olvide de las DO y mantenga su apoyo, potenciando el mercado doméstico y las rutas del vino. Rodríguez afirmó que la calidad de sus productos ha permitido amortiguar la crisis, pero aclaró que es necesaria la colaboración de la Administración para continuar con su labor, fundamental para la estabilidad de las familias en el rural.
En esta misma línea se expresó la representante de Mel de Galicia, Ester Ordóñez, quien aseguró que la riqueza que generan estas empresas se queda en la Comunidad y contribuye, además, a proyectar Galicia como símbolo de calidad.
Finalmente, Juárez apuntó que es posible que otros productos, como los pimientos de Oimbra, Outo o Mougán, se incorporen como marcas de calidad gallega, aunque aclaró que sólo se certificaran aquellos que presenten una identidad diferenciada.
Juárez, que estuvo acompañado por los representantes de los consejos reguladores de las DO y de las indicaciones geográficas protegidas de Galicia, resaltó la importancia de combatir la competencia desleal y mantener el rigor y la seriedad en el control de la producción. Es fundamental que todos los productores se mantengan dentro de los parámetros marcados para evitar el desprestigio que puede suponer la utilización de las denominaciones de origen de manera no apropiada, señaló.
Calidad y homogeneidad
En este sentido, explicó que, debido al pequeño tamaño de la mayoría de las explotaciones gallegas, el formato de las DO es el único que permite vender estos productos garantizando la calidad con altos niveles de homogeneidad. Por este motivo, aseguró que la Xunta va a mantener su política de fomento de los productos agroalimentarios de Galicia, ya que estas agrupaciones, que el ejercicio anterior facturaron 266 millones de euros, son un importante pilar del medio rural gallego.
De hecho, según los datos de las denominaciones de origen, emplearon directamente a más de 62.000 personas, lo que facilita el asentamiento de población en el medio rural, garantizando, además, una explotación sostenible del medio ambiente. Juárez destacó, además, la importancia de estos productos para promocionar la imagen de Galicia en el exterior como una marca de calidad y prestigio.
Petición de apoyo a la Administración
El presidente de la Denominación de Origen Ribeira Sacra, José Manuel Rodríguez, pidió a la Xunta que no se olvide de las DO y mantenga su apoyo, potenciando el mercado doméstico y las rutas del vino. Rodríguez afirmó que la calidad de sus productos ha permitido amortiguar la crisis, pero aclaró que es necesaria la colaboración de la Administración para continuar con su labor, fundamental para la estabilidad de las familias en el rural.
En esta misma línea se expresó la representante de Mel de Galicia, Ester Ordóñez, quien aseguró que la riqueza que generan estas empresas se queda en la Comunidad y contribuye, además, a proyectar Galicia como símbolo de calidad.
Finalmente, Juárez apuntó que es posible que otros productos, como los pimientos de Oimbra, Outo o Mougán, se incorporen como marcas de calidad gallega, aunque aclaró que sólo se certificaran aquellos que presenten una identidad diferenciada.
