La Consellería de Educación reiteró ayer que seguirá tramitando la reordenación de la jornada laboral del profesorado de Infantil, Primaria y Educación Especial pese a las protestas del colectivo, cuyos representantes protagonizaron en la mañana de ayer un encierro en dependencias de la Xunta.
Agentes del Cuerpo Nacional de Policía desalojaron sobre las 15.30 horas a la quincena de sindicalistas que se habían encerrado en la sala de juntas de la Consellería de Educación durante algo más de cuatro horas. El desalojo fue 'pacífico' y los representantes de CIG, CC.OO., UGT, ANPE, STEG y CESIF no opusieron 'resistencia' a los agentes de la policía, según manifestó Anxo Louzao, del sindicato nacionalista.
La protesta se realizó coincidiendo con la reunión de la mesa sectorial de Educación en la que los sindicatos propusieron la retirada de la propuesta que modifica el horario lectivo del profesorado de la enseñanza pública que, de manera 'unilateral' y 'antidemocrática', 'liquida' el acuerdo de 8 junio de 2007 que establecía 21 horas lectivas, aseguran las organizaciones.
El próximo curso se ampliará de 21 a 25 horas, aunque este colectivo mantiene las 37,5 horas semanales de actividad como cualquier otro funcionario, por lo que las cuatro horas de diferencia se restarán de otras actividades de apoyo al alumnado. Además, las organizaciones sindicales demandaban con esa concentración la presencia del propio conselleiro, Xesús Vázquez, en la reunión de la Mesa Sectorial de Educación.
CUSTODIA DEL TRANSPORTE
Con este aumento de horas se pretende, según Educación, que los profesores custodien a los estudiantes que utilizan el transporte escolar desde que llegan al centro educativo hasta que se marchan a sus casas, una función que para los sindicatos no es responsabilidad de los profesores, a quienes no se les permitirá realizar otras funciones que ahora estaban cumpliendo.
La Consellería de Educación informó de que los representantes sindicales, que se habían encerrado en las dependencias de este departamento autonómico, expresaron su 'rechazo a que el conselleiro recibiese a un representante de cada organización' por separado. Las fuentes de la consellería que dirige Jesús Vázquez señalaron también que los representantes de la Administración, que estaban presentes en la mesa, 'lamentaron no contar con las aportaciones de los sindicatos luego de exponer el contenido de la norma', que fue rechazada por las centrales, que 'se negaron a escuchar la réplica del Ejecutivo autonómico'.
El levantamiento y posterior encierro de los sindicalistas en la Xunta supuso, a juicio de Educación, una actitud 'poco responsable' y que manifestó también que la solicitud de cambiar la presidencia de la mesa, a cargo del director xeral de Recursos Humanos, José Manuel Pinal, por el titular de la consellería 'no es posible', ya que no está 'en sus competencias administrativas'. Por ello, Educación consideró 'roto el ofrecimiento de negociación' y anuncia que 'continuará la tramitación' de esta normativa.
Asimismo, destacó que 'entiende' la postura que mantienen los representantes de la centrales sindicales del sector educativo, pero que su obligación es 'velar por el beneficio de la mayoría de la sociedad gallega'.
La protesta se realizó coincidiendo con la reunión de la mesa sectorial de Educación en la que los sindicatos propusieron la retirada de la propuesta que modifica el horario lectivo del profesorado de la enseñanza pública que, de manera 'unilateral' y 'antidemocrática', 'liquida' el acuerdo de 8 junio de 2007 que establecía 21 horas lectivas, aseguran las organizaciones.
El próximo curso se ampliará de 21 a 25 horas, aunque este colectivo mantiene las 37,5 horas semanales de actividad como cualquier otro funcionario, por lo que las cuatro horas de diferencia se restarán de otras actividades de apoyo al alumnado. Además, las organizaciones sindicales demandaban con esa concentración la presencia del propio conselleiro, Xesús Vázquez, en la reunión de la Mesa Sectorial de Educación.
CUSTODIA DEL TRANSPORTE
Con este aumento de horas se pretende, según Educación, que los profesores custodien a los estudiantes que utilizan el transporte escolar desde que llegan al centro educativo hasta que se marchan a sus casas, una función que para los sindicatos no es responsabilidad de los profesores, a quienes no se les permitirá realizar otras funciones que ahora estaban cumpliendo.
La Consellería de Educación informó de que los representantes sindicales, que se habían encerrado en las dependencias de este departamento autonómico, expresaron su 'rechazo a que el conselleiro recibiese a un representante de cada organización' por separado. Las fuentes de la consellería que dirige Jesús Vázquez señalaron también que los representantes de la Administración, que estaban presentes en la mesa, 'lamentaron no contar con las aportaciones de los sindicatos luego de exponer el contenido de la norma', que fue rechazada por las centrales, que 'se negaron a escuchar la réplica del Ejecutivo autonómico'.
El levantamiento y posterior encierro de los sindicalistas en la Xunta supuso, a juicio de Educación, una actitud 'poco responsable' y que manifestó también que la solicitud de cambiar la presidencia de la mesa, a cargo del director xeral de Recursos Humanos, José Manuel Pinal, por el titular de la consellería 'no es posible', ya que no está 'en sus competencias administrativas'. Por ello, Educación consideró 'roto el ofrecimiento de negociación' y anuncia que 'continuará la tramitación' de esta normativa.
Asimismo, destacó que 'entiende' la postura que mantienen los representantes de la centrales sindicales del sector educativo, pero que su obligación es 'velar por el beneficio de la mayoría de la sociedad gallega'.
