Los funcionarios le advirtieron reiteradamente de que debía irse a su domicilio y la tercera vez lo detuvieron tras comprobar que había sido denunciado administrativamente en dos ocasiones ya
Un vecino de Carballo (A Coruña) había aceptado el pago de una multa de 360 euros por incumplir el confinamiento de manera reiterada, pero ha sido detenido de nuevo este lunes por volver a salir sin justificación que pueda encajarse en las excepciones establecidas en el Real Decreto de estado de alarma.
Según informa el Tribunal Superior de Justicia de Galicia, este hombre ha sido detenido de nuevo y citado este lunes para un nuevo juicio rápido, pero en esta ocasión no alcanzó un acuerdo con Fiscalía, por lo que ha sido citada para un juicio en el Juzgado de lo Penal número de A Coruña a finales de mes.
En el primer juicio, el Juzgado de Instrucción número 2 de Carballo, en funciones de guardia, lo había condenado al pago de una multa de 360 euros como autor de un delito de desobediencia.
En la sentencia el juez advertía al sospechoso que el incumplimiento de las medidas de confinamiento puede determinar su ingreso en prisión provisional.
El investigado, que en esa ocasión llegó a un acuerdo con la Fiscalía sobre la pena, reconoció haber salido a la calle sin justificación el 8 de abril.
Ese día fue interceptado en tres ocasiones por agentes, entre las 08:15 y las 09:50 horas, en diferentes calles de Carballo.
Los funcionarios le advirtieron reiteradamente de que debía irse a su domicilio y la tercera vez lo detuvieron tras comprobar que había sido denunciado administrativamente en dos ocasiones en días anteriores por el mismo motivo.
Según informa el Tribunal Superior de Justicia de Galicia, este hombre ha sido detenido de nuevo y citado este lunes para un nuevo juicio rápido, pero en esta ocasión no alcanzó un acuerdo con Fiscalía, por lo que ha sido citada para un juicio en el Juzgado de lo Penal número de A Coruña a finales de mes.
En el primer juicio, el Juzgado de Instrucción número 2 de Carballo, en funciones de guardia, lo había condenado al pago de una multa de 360 euros como autor de un delito de desobediencia.
En la sentencia el juez advertía al sospechoso que el incumplimiento de las medidas de confinamiento puede determinar su ingreso en prisión provisional.
El investigado, que en esa ocasión llegó a un acuerdo con la Fiscalía sobre la pena, reconoció haber salido a la calle sin justificación el 8 de abril.
Ese día fue interceptado en tres ocasiones por agentes, entre las 08:15 y las 09:50 horas, en diferentes calles de Carballo.
Los funcionarios le advirtieron reiteradamente de que debía irse a su domicilio y la tercera vez lo detuvieron tras comprobar que había sido denunciado administrativamente en dos ocasiones en días anteriores por el mismo motivo.
