El ex-subdelegado del Gobierno en Lugo Jesús Otero prestó declaración hoy como imputado ante la titular del Juzgado de Instrucción Número 1, que instruye el caso de la denominada 'Operación Carioca', con la que se pretenden clarificar presuntos delitos relacionados con la prostitución en la provincia de Lugo.
Otero, que había cesado en el cargo por una imputación anterior en otro caso que investiga el Juzgado de Instrucción Número 3, por supuesto sobreseimiento irregular de sanciones en Jefatura Provincial de Tráfico, no quiso realizar declaraciones tras haber permanecido durante unos 35 minutos ante la jueza.
Fuentes del caso sí confirmaron que su comparecencia se produjo como presunto autor de la omisión del deber de perseguir un delito, en función de su responsabilidad jerárquica sobre agentes de la Guardia Civil, también imputados en este mismo caso, y máximo responsable de la firma de la concesión de permisos de residencia que se tramitaban desde los servicios de extranjería.
De hecho, un cabo del Instituto Armado de la Comandancia de Lugo que estaba adscrito a la Unidad de la Policía Judicial, está detenido y preso en el Centro Penitenciario de Monterroso.
Recientemente también tuvo que acudir a declarar como imputado el subteniente de la misma comandancia J.B., quien quedó en libertad una vez que realizó su testimonio ante la jueza.
Además del ex-subdelegado, la instructora también llamó a declarar a un comandante de la Guardia Civil como responsable directo de los agentes de la Policía Judicial hasta ahora imputados.
Hasta el momento, en la Operación Carioca aparecen como imputados casi medio centenar de personas, entre los que figura un inspector de la Policía Local, también en la prisión de Monterroso, y un Policía Nacional que prestaba servicio en Barajas y que, tras haber pasado varios meses en el mismo centro penitenciario, ahora se encuentra en libertad con medidas cautelares.
Recientemente, 5 prostitutas, la mayor parte brasileñas, que son testigos protegidos, prestaron declaración ante la titular instructora.
Fue una práctica excepcional con la que se quiso 'preconstituir' la prueba de declaración de estas 5 personas, con el fin de garantizar su testimonio en el caso de que no pudieran ser localizadas para la vista oral, señalaron las fuentes.
La investigación de esta operación tuvo su punto culminante en la madrugada del pasado 16 de octubre, cuando agentes de la Policía Nacional irrumpieron en 4 locales de alterne que ahora permanecen precintados, lo mismo que un quinto establecimiento de estas características en el que entraron días después.
Fuentes del caso sí confirmaron que su comparecencia se produjo como presunto autor de la omisión del deber de perseguir un delito, en función de su responsabilidad jerárquica sobre agentes de la Guardia Civil, también imputados en este mismo caso, y máximo responsable de la firma de la concesión de permisos de residencia que se tramitaban desde los servicios de extranjería.
De hecho, un cabo del Instituto Armado de la Comandancia de Lugo que estaba adscrito a la Unidad de la Policía Judicial, está detenido y preso en el Centro Penitenciario de Monterroso.
Recientemente también tuvo que acudir a declarar como imputado el subteniente de la misma comandancia J.B., quien quedó en libertad una vez que realizó su testimonio ante la jueza.
Además del ex-subdelegado, la instructora también llamó a declarar a un comandante de la Guardia Civil como responsable directo de los agentes de la Policía Judicial hasta ahora imputados.
Hasta el momento, en la Operación Carioca aparecen como imputados casi medio centenar de personas, entre los que figura un inspector de la Policía Local, también en la prisión de Monterroso, y un Policía Nacional que prestaba servicio en Barajas y que, tras haber pasado varios meses en el mismo centro penitenciario, ahora se encuentra en libertad con medidas cautelares.
Recientemente, 5 prostitutas, la mayor parte brasileñas, que son testigos protegidos, prestaron declaración ante la titular instructora.
Fue una práctica excepcional con la que se quiso 'preconstituir' la prueba de declaración de estas 5 personas, con el fin de garantizar su testimonio en el caso de que no pudieran ser localizadas para la vista oral, señalaron las fuentes.
La investigación de esta operación tuvo su punto culminante en la madrugada del pasado 16 de octubre, cuando agentes de la Policía Nacional irrumpieron en 4 locales de alterne que ahora permanecen precintados, lo mismo que un quinto establecimiento de estas características en el que entraron días después.
