Un traicionero golpe de mar, mientras pescaban robaliza 'na rompente' de las aguas que bañan la buenense Isla de Ons, se cree que fue lo que provocó que volcara la planeadora en la que faenaban dos pescadores ocasionales y murieran ahogados sobre las diez de la mañana de ayer. Se trata de Francisco Pérez Otero, de 54 años, nativo de la buenense Isla de Ons, y Emilio Martínez Patiño, de 39 natural de Cangas, cuyos cadáveres está previsto que puedan velar sus familias desde el mediodía de hoy.
El mar volvió a enlutar ayer Bueu, dado que los dos hombres vivían en la misma villa. Francisco Pérez Otero, nacido el 9 de noviembre de 1957 y que tenía su vivienda en O Valado, estaba casado y tenía dos hijas mayores de edad, una de las cuales trabaja en el negocio particular del alcalde, Félix Juncal Novas, del BNG, mientras que Emilio 'Tito' Martínez Patiño, que cumpliría los 40 años el venidero 23 de abril, dado que naciera en 1972, deja un hijo mayor de edad fruto de su matrimonio, aunque llevaba unos años separado y viviendo con su actual pareja en un piso de la urbanización Alonso.
En realidad Francisco Pérez era un armador que estaba tramitando la prejubilación tras entregar a la Xunta de Galicia para desguace su embarcación 'O Volador', dados los problemas de salud que tenía, en tanto que Tito Martínez era marinero de bajura, ahora en el paro, siendo los dos excelentes nadadores, pero ayer entre las islas de Ons y Onza, aguas en que pescaban por afición para la comida diaria en una pequeña planeadora, trabajaba mucho el mar de fondo y toda la veteranía y experiencia es poca cuando estás sobre las olas, coincidían en afirmar los marineros y el propio Patrón Mayor de Bueu, José Manuel Rosas Otero, ayer mientras esperaban en el entorno de la lonja que los cuerpos de sus dos compañeros fueran desembarcados.
Las familias de los fallecidos nada más tener conocimiento de la tragedia se fueron al puerto de Bueu, no encontrando explicación a lo sucedido porque no solían ir a pescar juntos, de hecho era habitual verles echar la partida cada mañana en la cafetería de la Casa del Mar. Además, la familia de Francisco Pérez le insistía en que se olvidara del mar.
UNO DE LOS PESCADORES MUERTOS PRESENTABA UN GOLPE EN LA CABEZA
Un claro golpe en la cabeza presentaba el cadáver de uno de los dos marineros buenenses a los que la muerte sorprendió mientras pescaban. Las causas reales de su fallecimiento debieran quedar aclaradas tras la autopsia que se les hace esta mañana en el Instituto Anatómico Forense de Pontevedra, pero sean cuales sean las causas no habrá explicación para sus familias, que ayer preguntaban en el puerto una y otra vez 'por qué' tuvieron que morir siendo como eran buenos nadadores, e incluso buceador el más joven, Emilio Martíñez.
Salvamento Marítimo informaba que recibió a las 10.10 horas una llamada del pesquero 'Choni' que alertaba de una planeadora de color rojo de unos 4,5 metros de eslora volcada entre las islas buenenses de Ons y Onza.Fue movilizada la lancha de intervención rápida 'Salvamar Sargadelos', que ya localizó entre aguas un cadáver y el pesquero 'Rayma' el otro, participando también en la búsqueda el helicóptero 'Pesca I'. La Guardia Civil, tras las investigaciones realizadas al conocer el naufragio, confirmó que eran esdos los tripulantes, que trasladó al puerto de Bueu la embarcación 'Río Guadalope' de la Guardia Civil, aunque los dos cadáveres fueron examinados a bordo por el forense antes de desembarcarlos.
En realidad Francisco Pérez era un armador que estaba tramitando la prejubilación tras entregar a la Xunta de Galicia para desguace su embarcación 'O Volador', dados los problemas de salud que tenía, en tanto que Tito Martínez era marinero de bajura, ahora en el paro, siendo los dos excelentes nadadores, pero ayer entre las islas de Ons y Onza, aguas en que pescaban por afición para la comida diaria en una pequeña planeadora, trabajaba mucho el mar de fondo y toda la veteranía y experiencia es poca cuando estás sobre las olas, coincidían en afirmar los marineros y el propio Patrón Mayor de Bueu, José Manuel Rosas Otero, ayer mientras esperaban en el entorno de la lonja que los cuerpos de sus dos compañeros fueran desembarcados.
Las familias de los fallecidos nada más tener conocimiento de la tragedia se fueron al puerto de Bueu, no encontrando explicación a lo sucedido porque no solían ir a pescar juntos, de hecho era habitual verles echar la partida cada mañana en la cafetería de la Casa del Mar. Además, la familia de Francisco Pérez le insistía en que se olvidara del mar.
UNO DE LOS PESCADORES MUERTOS PRESENTABA UN GOLPE EN LA CABEZA
Un claro golpe en la cabeza presentaba el cadáver de uno de los dos marineros buenenses a los que la muerte sorprendió mientras pescaban. Las causas reales de su fallecimiento debieran quedar aclaradas tras la autopsia que se les hace esta mañana en el Instituto Anatómico Forense de Pontevedra, pero sean cuales sean las causas no habrá explicación para sus familias, que ayer preguntaban en el puerto una y otra vez 'por qué' tuvieron que morir siendo como eran buenos nadadores, e incluso buceador el más joven, Emilio Martíñez.
Salvamento Marítimo informaba que recibió a las 10.10 horas una llamada del pesquero 'Choni' que alertaba de una planeadora de color rojo de unos 4,5 metros de eslora volcada entre las islas buenenses de Ons y Onza.Fue movilizada la lancha de intervención rápida 'Salvamar Sargadelos', que ya localizó entre aguas un cadáver y el pesquero 'Rayma' el otro, participando también en la búsqueda el helicóptero 'Pesca I'. La Guardia Civil, tras las investigaciones realizadas al conocer el naufragio, confirmó que eran esdos los tripulantes, que trasladó al puerto de Bueu la embarcación 'Río Guadalope' de la Guardia Civil, aunque los dos cadáveres fueron examinados a bordo por el forense antes de desembarcarlos.
