Aunque se impone la tesis de que Rueda será vicepresidente, su jefe de filas sigue sin despejar las dudas

Feijóo desaparece cuatro días con el Gobierno paralizado

Jorquera y Aymerich saludan a Yolanda Díaz y a Beiras en el pleno de constitución de la Cámara.
Cuatro días sin noticias de Feijóo. Desde que el pasado viernes, día en el que se constituyó el Parlamento gallego, el presidente en funciones no tuvo agenda pública. La intención es que el próximo día 1 de diciembre tome posesión de nuevo como máximo mandatario del Gobierno gallego y las dudas que ululan incluso entre los militantes del PP es la composición del Ejecutivo, en este momento paralizado, pero que tendrá que afrontar una legislatura difícil, máxime cuando en campaña se prometió iniciar la senda del crecimiento en una comunidad en la que se ha disparado el desempleo.
Casi cien horas después, Alberto Núñez Feijóo recupera la actividad política con su presencia en la puesta de largo del polígono empresarial de Sionlla, en Santiago, acompañado de Agustín Hernández, conselleiro en funciones de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas. Y todo apunta a que el líder del PPdeG tomó cuatro días para reflexionar sobre el perfil de su nuevo Gobierno. La ausencia del presidente en funciones ha sido palmaria e incluso la Xunta emitió ayer un comunicado para afirmar que se había reunido con el ministros de Industria para 'abordar el nuevo 'tax lease' y otros asuntos de interés para Galicia'.
El reto de Feijóo para esta legislatura es la de esta vez sí cumplir con lo prometido durante la campaña electoral. El presidente en funciones ha despejado cuatro días su agenda para analizar las incógnitas de su próximo Ejecutivo. La gran duda, que muchos en el partido dan por hecho, es si nombra a Alfonso Rueda, coordinador de las dos campañas que lo catapultó al poder, vicepresidente. También existe la posibilidad de que el nombramiento se produzca no ahora, sino cuando la legislatura comience a rodar.

muchas cábalas
Son muchas las cábalas que se hacen en el PP, aunque es competencia exclusiva de Feijóo, una persona a la que le gusta amarrar hasta el más nimio de los discursos, nombrar a su Gobierno. Si impera la tesis prevalente en el PPdeG, el nuevo Gobierno de Galicia tendrá pocos cambios. Solo la conselleira de Sanidade, Rocío Mosquera, parace tener los días contados. Alberto Núñez Feijóo quiere tener los presupuestos aprobados para el próximo año antes de diciembre, circunstancia que no le permite hacer muchos cambios, pues cualquier incorporación necesitaría de un tiempo para elaborar un documento decisivo para el próximo año.
Con los grupos parlamentarios ya constituidos, faltan las consultas de la presidenta de Parlamento, Pilar Rojo, y la reunión de la Mesa para que Feijóo se investido otra vez como presidente de la Xunta, que previsiblemente será el día 1 del próximo mes. Después tendrá que nombrar Gobierno y una de las grandes dudas, que despejará muchas incógnitas, es si Alfonso Rueda compagina su cargo en el Ejecutivo con el de Parlamentario.
Ese día se sabrá también cuál es el futuro de Núñez Feijóo, al que muchos en el PP sitúan con Mariano Rajoy en el Gobierno central cuando se produzca una remodelación del Ejecutivo. Si Feijóo se siente en una silla en Madrid, Alfonso Rueda, en caso de seguir en el Parlamento, tendría todas las papeletas para sustituirlo al frente de la Xunta.

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