Se denunció la desaparición de la mujer de 86 años de edad el pasado 16 de enero
Un vecino de Meira encontró ayer por la tarde unos restos humanos en una finca de su propiedad, en el lugar de Porto do Couso que, según los primeros indicios, podrían corresponder a Oliva López Tella, la anciana de 86 años de edad que había desaparecido de su casa el pasado 16 de enero.
El alcalde de Meira, Antonio de Dios, informó a Efe de que este vecino lo llamó "a las siete menos cuarto de la tarde" de ayer para avisarlo de que había hallado unos restos humanos en un prado al que se desplazó para cortar hierba.
El regidor local explicó que hacía tiempo que este hombre no iba a ese prado, una finca conocida por el nombre de As Peneliñas, por lo que la hierba estaba un poco alta.
Al acceder a la finca, "vio una cosa blanca" y se acercó para ver de qué se trataba, porque pensó que podía ser de un animal muerto, pero al aproximarse ya se percató de que eran los restos de una persona.
El propio regidor alertó a las autoridades y hasta el lugar se desplazaron efectivos de la Guardia Civil, el forense y miembros de la Policía Judicial, que estuvieron recabando pruebas en el lugar del hallazgo.
Antonio de Dios aclaró que ahora habrá que esperar a conocer los resultados de las pruebas de ADN para verificar si la identidad de los restos hallados son los de Oliva López Tella.
El hallazgo se produjo a unos ocho kilómetros de la casa de la anciana, que vivía en Murias, en la parroquia de Seixosmil, y a un kilómetro aproximadamente de la vivienda en la que nació.
