El conselleiro de Medio Ambiente, Territorio e Infraestruturas, Agustín Hernández, avanzó ayer que los dos jefes de servicio de la Sociedade Galega de Medio Ambiente (Sogama) imputados por supuesto tráfico de influencias quedan apartados de los procesos de adjudicación 'para que el nombre de la sociedad quede absolutamente fuera de toda duda'. Hernándezdefendió la presunción de inocencia de los imputados, que 'no son altos cargos sino empleados, y uno de ellos es además representante de los trabajadores', y recordó que en el pasado participaron en procesos de adjudicación 'de un modo muy puntual'.
Como quiera que 'tienen una vinculación laboral con la empresa', la Xunta tiene que 'respetar' la misma, tal y como ratifican 'los informes jurídicos solicitados' por su departamento y que 'obran en poder del presidente' de Sogama. Recalcó que su departamento 'garantiza su total colaboración con la Justicia' y significó que el proceso judicial 'arranca en la época del bipartito' como consecuencia de unos vertidos al río Lengüelle, y que tiene una pieza separada que afecta, insistió, a 'dos empleados, que no altos cargos', de Sogama.
El Juzgado de Instrucción número 1 de A Coruña imputó a A.J.C.V., jefe de transferencia y transporte de Sogama, y R.P.M., responsable del área técnica de la sociedad pública, por un supuesto delito de tráfico de influencias, ya que se les acusa de tratar de intervenir en varios procesos de contratación de este organismo. Además, en este proceso está imputado el delegado en A Coruña de la empresa Danigal, J.S.C.C., una subcontratada de Sogama por la que supuestamente se intercedió en los procesos de adjudicación de contratos.
El Juzgado de Instrucción número 1 de A Coruña imputó a A.J.C.V., jefe de transferencia y transporte de Sogama, y R.P.M., responsable del área técnica de la sociedad pública, por un supuesto delito de tráfico de influencias, ya que se les acusa de tratar de intervenir en varios procesos de contratación de este organismo. Además, en este proceso está imputado el delegado en A Coruña de la empresa Danigal, J.S.C.C., una subcontratada de Sogama por la que supuestamente se intercedió en los procesos de adjudicación de contratos.
