La entidad pública Aeropuertos Españoles y Navegación Aérea (Aena) informó ayer de que puso en marcha 'las medidas necesarias' para garantizar el normal funcionamiento del aeropuerto de Santiago, después de que los controladores hayan intentado impedir la normalidad del tráfico aéreo.
La Unión Sindical de Controladores Aéreos había avisado previamente del cierre parcial del servicio de tráfico aéreo en el centro de control de Santiago al haber superado estos profesionales el límite de horas trabajadas como consecuencia de la entrada en vigor de la Ley 9/2010. Así, durante el turno de ayer por la tarde en el aeropuerto de Lavacolla un controlador no acudió a su puesto de trabajo, 'sin justificación', y los otros dos 'intentaron impedir la normalidad del tráfico aéreo', según Aena. La entidad señaló, además, que los controladores 'están tratando de impedir la habilitación de nuevos profesionales para provocar problemas en el mes de diciembre'.
Pese a todo, los vuelos en Compostela 'operaron con normalidad a pesar de los intentos de los dos controladores que trabajaron por la tarde por impedir el correcto funcionamiento del aeropuerto'.
De los tres controladores que debía haber trabajado ayer por tarde, uno no acudió a su puesto de trabajo al alegar que 'había superado el límite anual de 1.670 horas de actividad aeronáutica'. Ante esta situación, Aena informó de que adoptará 'las medidas que le permita la Ley ante una ausencia injustificada al puesto de trabajo dado que el controlador no excedió el cómputo anual de horas de actividad aeronáutica.
'Los siete controladores que en estos momentos están en proceso de habilitación para reforzar la dotación de personal del centro de control de Santiago están sufriendo presiones para que no completen su periodo de formación', sostiene y añade que los controladores 'quieren forzar que en diciembre no haya suficiente personal y provocar problemas en los tres aeropuertos'.
Pese a todo, los vuelos en Compostela 'operaron con normalidad a pesar de los intentos de los dos controladores que trabajaron por la tarde por impedir el correcto funcionamiento del aeropuerto'.
De los tres controladores que debía haber trabajado ayer por tarde, uno no acudió a su puesto de trabajo al alegar que 'había superado el límite anual de 1.670 horas de actividad aeronáutica'. Ante esta situación, Aena informó de que adoptará 'las medidas que le permita la Ley ante una ausencia injustificada al puesto de trabajo dado que el controlador no excedió el cómputo anual de horas de actividad aeronáutica.
'Los siete controladores que en estos momentos están en proceso de habilitación para reforzar la dotación de personal del centro de control de Santiago están sufriendo presiones para que no completen su periodo de formación', sostiene y añade que los controladores 'quieren forzar que en diciembre no haya suficiente personal y provocar problemas en los tres aeropuertos'.
