Los socialistas acusan a la Xunta de ocultar información y el BNG de ausencia de prevención

Los partidos se tiran los trastos por la lucha contra incendios

El Parlamento de Galicia fue escenario ayer de una agria discusión a cuenta de la gestión de la Xunta en la campaña de incendios forestales, en la que el PP y oposición recurrieron a las comparaciones entre el verano de 2006, cuando gobernaba el bipartito, y el actual.
Hubo cruce de acusaciones, las más acaloradas fuera de micrófono; un baile de cifras sobre hectáreas quemadas y también, por parte del PSdeG, petición de responsabilidades políticas por la muerte de los dos brigadistas en el incendio de Fornelos de Montes.

La defensora de ambas iniciativas, la socialista Sonia Verdes, prendió la mecha atacando a la Xunta por 'manipular' los datos sobre las hectáreas afectadas, como en el incendio de Chandrexa de Queixa, donde, dijo, 'no fueron 393' según las cifras oficiales, sino que 'superaron con creces las 600'.

La nacionalista Tereixa Paz se centró en denunciar los recortes en materia de prevención, en tanto que el popular Álvarez Chao aseguró que el porcentaje de los contratos fijos y fijos discontinuos en las brigadas de extinción 'son los mismos' que en la etapa del Gobierno de coalición entre socialistas y nacionalistas y se preguntó por qué no aumentó la cifra de efectivos después del 'verano trágico' de 2006.

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