Unos desconocidos robaron en la madrugada del viernes una ambulancia asistencial del 061 que tenía su base en el centro de especialidades vigués de A Doblada y que apareció a mediodía de ayer sumergida en la ría junto al muelle de Canido. El vehículo con todo su aparataje está valorado en 45.000 euros y quedó inservible.
Este suceso se produce en un momento delicado para las empresas que prestan este servicio, en este caso Ambulancias del Atlántico, puesto que están pendientes de la renovación del concierto con el Sergas (el actual termina en abril) y coincide además con el inicio de una huelga convocada por los sindicatos los 12, 13 y 14 en este sector y que podría hacerse indefinida a partir del día 19.
La ambulancia robada terminó su turno el jueves a las diez de la noche y a las siete de la mañana de ayer la dotación que empezaba su turno detectó su desaparición de la base de la calle Faisán. La empresa llamó de inmediato a la Policía Local y presentó una denuncia por escrito en la Policía Nacional. El gerente de Ambulancias del Atlántico, Primo Pérez, decía que no recordaba nada semejante en los 30 años que lleva en el sector, salvo pinchazos en las ruedas y la quema de un vehículo en 2006 coincidiendo con una huelga del sector.
Tras la aparición del vehículo, se dio aviso a los bomberos y comenzó una operación de rescate entre las cuatro y las siete de la tarde que fue seguida por numerosos vecinos y curiosos. Al lugar acudieron dos grúas y al no poder con la ambulancia fue necesaria la presencia de un camión más grande en la rampa del muelle de Canido. En el agua, dos buzos de bomberos, José Nogueira y Joaquín Fuentes, se encargaron de enganchar el vehículo. 'Fue trabajoso porque había poca visibilidad y porque como llevaba tiempo en el agua las ruedas estaban totalmente obstruidas', explicaron los bomberos, que forman parte de un equipo compuesto por 16 buzos.
Finalmente, la engancharon y se remolcó a tierra para después llevarla al depósito municipal.
La ambulancia robada terminó su turno el jueves a las diez de la noche y a las siete de la mañana de ayer la dotación que empezaba su turno detectó su desaparición de la base de la calle Faisán. La empresa llamó de inmediato a la Policía Local y presentó una denuncia por escrito en la Policía Nacional. El gerente de Ambulancias del Atlántico, Primo Pérez, decía que no recordaba nada semejante en los 30 años que lleva en el sector, salvo pinchazos en las ruedas y la quema de un vehículo en 2006 coincidiendo con una huelga del sector.
Tras la aparición del vehículo, se dio aviso a los bomberos y comenzó una operación de rescate entre las cuatro y las siete de la tarde que fue seguida por numerosos vecinos y curiosos. Al lugar acudieron dos grúas y al no poder con la ambulancia fue necesaria la presencia de un camión más grande en la rampa del muelle de Canido. En el agua, dos buzos de bomberos, José Nogueira y Joaquín Fuentes, se encargaron de enganchar el vehículo. 'Fue trabajoso porque había poca visibilidad y porque como llevaba tiempo en el agua las ruedas estaban totalmente obstruidas', explicaron los bomberos, que forman parte de un equipo compuesto por 16 buzos.
Finalmente, la engancharon y se remolcó a tierra para después llevarla al depósito municipal.
