ACCIDENTE DE TREN

“Salí volando, una sensación horrible"

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photo_camera José Aldo Antunes, ayer en Povisa con su mujer, donde se recuperaba de los golpes recibidos.

"El tren era muy viejo y creo que iba muy rápido", dice el brasileño Antunes, aún ingresado por el accidente

José Aldo Antunes, ciudadano brasileño, se llevará para siempre un recuerdo de su visita a Galicia, que podrá contar como protagonista involuntario del accidente ferroviario. Ayer se recuperaba de su fracturas y heridas en el hospital Povisa, y según explicó, los médicos le dará el alta mañana mismo, por lo que podrá continuar con su viaje por España y Portugal. En el Tren Celta viajaba con su mujer, médico de profesión de lejanos orígenes vigueses, quien salió sin apenas heridas del suceso. Viajaban en cabeza, donde se produjo el mayor daño.

Contaba con bastante buen humor Aldo Antunes que en la mañana del viernes habían salido de Vigo hacia Oporto para conocer la ciudad portuguesa y seguir camino hacia el sur del país vecino. "Estoy de vacaciones, íbamos a ir a Oporto y luego continuar hacia Lisboa y Evora y cruzar a Mérida y después a Sevilla, todavía espero hacer el viaje", contaba, tras recibir la visita del médico que le dio buenas noticias: tiene tres costillas fracturadas y otras lesiones menores por el cuerpo y la cabeza, pero como él mismo señala "felizmente no tuve ningún órgano interno afectado. Así que mañana me dan el alta. Lo que me han dicho es que puedo moverme pero cuidado y no coger peso, hablé con el médico, y podré seguir el viaje".

Lo que sí tiene muy presente es el accidente y cómo lo sintió. "Lo que más noté fue el impacto de cómo chocó el tren, fue una sensación horrible. Estuve dándome golpes por el tren, iba en el primer vagón. Siento de repente que el tren salió del suelo e impactó y ya salimos volando, y nos golpeamos la cabeza", explica.

¿Perdió la conciencia en algún momento durante el accidente?

Sí, por un instante perdí la conciencia, pero en seguida vi a la gente tratando de recuperarse. Pero en el primer momento perdí el conocimiento. Fue un susto muy grande, pero no me puedo quejar, otros tuvieron menos suerte y perdieron la vida.

¿Tras el impacto, cómo se encontró, qué fue lo que hizo pasar salir?

Estaba con mucho dolor. No conseguía moverme, pero tenía a mi esposa que sufrió menos, afortunadamente. En seguida, ya en el primer momento, llegaron personas a ayudarnos, porque el accidente fue muy cerca de la estación y la gente que estaba allí se acercó y ayudar. Al final salí por la ventana, en la parte tumbada del tren.

¿Qué cree que pasó realmente? Iba muy rápido el tren, como se especula?

Iba a mucha velocidad, no diría que excesiva, pero ahí, en esa parte del trayecto, sí iba muy rápido. Sólo en esa parte, porque salió de Vigo despacio. Pensándolo bien, también me llamó la atención que era un tren viejo, muy viejo. Demasiado viejo para hacer un trayecto como éste.

¿Qué tal fue su visita a Galicia, descubrió algo?

Estuvimos dos días en Vigo, básicamente para conocer al abuelo de mi mujer, que había nacido en Vigo y le hacía ilusión.

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