La plaza del Obradoiro, en Santiago de Compostela, volvió a acoger hoy una concentración silenciosa de repulsa por el último atentado terrorista ocurrido en el sur de Francia y medio centenar de asistentes secundaron así la convocatoria hecha por la Federación Española de Municipios y Provincias (FEMP) y la Federación Galega de Municipios e Provincias (Fegamp).
A las doce del mediodía, ante la sede del Ayuntamiento de Santiago de Compostela, el teniente de alcalde, Néstor Rego (BNG), encabezó la concentración en la que se guardó un minuto de silencio por la muerte del guardia civil Raúl Centeno y en solidaridad con su compañero herido Fernando Trapero.
A este acto de solidaridad y, al mismo tiempo, de condena al terrorismo se sumaron varios ediles compostelanos del PSdeG, BNG y PPdeG, así como el arzobispo de Santiago de Compostela, Julián Barrio, junto con trabajadores en el Ayuntamiento compostelano y en la Universidad de Santiago, además de ciudadanos anónimos; que al término del minuto de silencio cerraron la concentración con un aplauso.
AVT
En la concentración también estaban miembros de la Delegación de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) de Galicia, quienes portaron una bandera española y un papel en el que se podía leer: 'PSOE y BNG hipócritas' y los nombres de los tres guardia civiles asesinados por el Grapo en Santiago en agosto de 1978 y marzo de 1989, para los que se reivindica que calles de la capital gallega lleven su nombre.
Esta reivindicación se enmarca en lo sucedido la semana pasada en un pleno municipal, cuando el PP pidió que se les rindiese este homenaje, pero no fue adelante porque no hubo consenso sobre el nomenclátor conjunto para 69 calles, plazas y vías de la ciudad y PSdeG y BNG aprobaron su propuesta.
Al respecto, la delegada de la AVT en Galicia, Josefina Saavedra, criticó la actitud de los dos socios en el Gobierno local y dijo que 'niegan' que calles de la ciudad lleven el nombre de los guardias civiles asesinados y se ponen el de otras personas con otros méritos menores. Además, afirmó que 'no les duele prendas' en solidarizarse con los vecinos de O Eixo, condenados a prisión por agredir a un policía en una manifestación vecinal hace nueve años.
Por otra parte, Josefina Saavedra recriminó que 'cada vez que se negocia con ETA' las heridas 'abiertas' de las víctimas del terrorismo 'se agravan' y también aludió a que acciones como las sufridas por Raúl Centeno y Fernando Trapero aumentan esta sensación.
La de hoy fue la segunda concentración celebrada en la capital de Galicia en rechazo al último atentado terrorista, ya que ayer también hubo un acto similar en el Obradoiro, que estuvo presidido por el regidor compostelano, Xosé Sánchez Bugallo (PSdeG), quien hoy está de viaje oficial en Madrid.
A este acto de solidaridad y, al mismo tiempo, de condena al terrorismo se sumaron varios ediles compostelanos del PSdeG, BNG y PPdeG, así como el arzobispo de Santiago de Compostela, Julián Barrio, junto con trabajadores en el Ayuntamiento compostelano y en la Universidad de Santiago, además de ciudadanos anónimos; que al término del minuto de silencio cerraron la concentración con un aplauso.
AVT
En la concentración también estaban miembros de la Delegación de la Asociación de Víctimas del Terrorismo (AVT) de Galicia, quienes portaron una bandera española y un papel en el que se podía leer: 'PSOE y BNG hipócritas' y los nombres de los tres guardia civiles asesinados por el Grapo en Santiago en agosto de 1978 y marzo de 1989, para los que se reivindica que calles de la capital gallega lleven su nombre.
Esta reivindicación se enmarca en lo sucedido la semana pasada en un pleno municipal, cuando el PP pidió que se les rindiese este homenaje, pero no fue adelante porque no hubo consenso sobre el nomenclátor conjunto para 69 calles, plazas y vías de la ciudad y PSdeG y BNG aprobaron su propuesta.
Al respecto, la delegada de la AVT en Galicia, Josefina Saavedra, criticó la actitud de los dos socios en el Gobierno local y dijo que 'niegan' que calles de la ciudad lleven el nombre de los guardias civiles asesinados y se ponen el de otras personas con otros méritos menores. Además, afirmó que 'no les duele prendas' en solidarizarse con los vecinos de O Eixo, condenados a prisión por agredir a un policía en una manifestación vecinal hace nueve años.
Por otra parte, Josefina Saavedra recriminó que 'cada vez que se negocia con ETA' las heridas 'abiertas' de las víctimas del terrorismo 'se agravan' y también aludió a que acciones como las sufridas por Raúl Centeno y Fernando Trapero aumentan esta sensación.
La de hoy fue la segunda concentración celebrada en la capital de Galicia en rechazo al último atentado terrorista, ya que ayer también hubo un acto similar en el Obradoiro, que estuvo presidido por el regidor compostelano, Xosé Sánchez Bugallo (PSdeG), quien hoy está de viaje oficial en Madrid.
