El presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, comprometió la eliminación de la totalidad de los puntos negros de las carreteras gallegas durante la próxima legislatura y apuntó que ya se eliminó prácticamente el 70 por ciento de los 86 existentes.
En la próxima legislatura vamos a culminar la tarea en esta dirección eliminando la totalidad de esos tramos de concentración de accidentes, garantizó el máximo mandatario gallego durante su intervención en el inicio de las obras de la segunda fase de la variante de Marín (Pontevedra).
Para enfatizar el compromiso público con la seguridad vial, recordó que la Xunta puso en marcha el primer Plan de Seguridade Viaria de ámbito autonómico de España, para el que se destina, entre 2006 y 2010, unos 280 millones de euros; y anunció que el previsto para 2011-2013 elevará el esfuerzo inversor hasta los 365 millones de euros.
Un 30 por ciento más, cifró Touriño, quien destacó el esfuerzo sin precedentes del Gobierno gallego en esta materia. No vamos a bajar la guardia sino que vamos a incrementar el esfuerzo, porque sé que así lo quieren los ciudadanos de este país, proclamó.
Finalmente, apeló a la responsabilidad de las familias, de los jóvenes, de los centros educativos y de toda la sociedad. Para salvaguardar ese valor que por encima de todo tenemos: la vida, concluyó el jefe del Ejecutivo gallego.
DOLOR POR LOS FALLECIDOS
Durante su visita a la localidad marinense, Touriño enmarcó la infraestructura cuyas obras comienzan hoy en el compromiso de la Xunta por mejorar la seguridad vial e hizo una mención especial a las cinco personas que perdieron la vida en las carreteras gallegas durante este fin de semana en dos accidentes y un atropello.
Desde el sentimiento, la preocupación y el dolor que sin duda tenemos todos, queremos acompañar a las familias que viven unos momentos difíciles, trasladó el presidente de la Xunta, quien apostó por construir un país seguro y confiable y capaz de afrontar con orgullo, vocación, pasión y precisión la batalla de seguir reduciendo drásticamente la accidentalidad.
VARIANTE DE MARIN
Por otra parte, Touriño participó en el acto simbólico de colocación de la primera piedra de la variante de Marín y destacó que esta infraestructura contará con una inversión de 34 millones de euros.
A su juicio, esta obra servirá para hacer frente a la crisis económica en términos de empleo, así como para reducir la accidentalidad y para dotar de más seguridad a los usuarios de la vía.
Se trata de un tramo de 4,4 kilómetros de longitud entre O Regueiriño, en Marín y Mollabao, en la parroquia pontevedresa de Lourizán --al lado del complejo de Ence--, que enlazará con la PO-12 (acceso oeste a Pontevedra) y con el ramal de acceso a la Autopista del Atlántico (AP-9).
Este segundo sector se adjudicó hace unas semanas a la empresa San José por algo más de 20 millones de euros y además de la ejecución de los 4,4 kilómetros de vía, el proyecto incluye la remodelación completa del nudo de conexión entre la autovía de Marín y la autopista, que se ejecutará en colaboración con Fomento.
Para enfatizar el compromiso público con la seguridad vial, recordó que la Xunta puso en marcha el primer Plan de Seguridade Viaria de ámbito autonómico de España, para el que se destina, entre 2006 y 2010, unos 280 millones de euros; y anunció que el previsto para 2011-2013 elevará el esfuerzo inversor hasta los 365 millones de euros.
Un 30 por ciento más, cifró Touriño, quien destacó el esfuerzo sin precedentes del Gobierno gallego en esta materia. No vamos a bajar la guardia sino que vamos a incrementar el esfuerzo, porque sé que así lo quieren los ciudadanos de este país, proclamó.
Finalmente, apeló a la responsabilidad de las familias, de los jóvenes, de los centros educativos y de toda la sociedad. Para salvaguardar ese valor que por encima de todo tenemos: la vida, concluyó el jefe del Ejecutivo gallego.
DOLOR POR LOS FALLECIDOS
Durante su visita a la localidad marinense, Touriño enmarcó la infraestructura cuyas obras comienzan hoy en el compromiso de la Xunta por mejorar la seguridad vial e hizo una mención especial a las cinco personas que perdieron la vida en las carreteras gallegas durante este fin de semana en dos accidentes y un atropello.
Desde el sentimiento, la preocupación y el dolor que sin duda tenemos todos, queremos acompañar a las familias que viven unos momentos difíciles, trasladó el presidente de la Xunta, quien apostó por construir un país seguro y confiable y capaz de afrontar con orgullo, vocación, pasión y precisión la batalla de seguir reduciendo drásticamente la accidentalidad.
VARIANTE DE MARIN
Por otra parte, Touriño participó en el acto simbólico de colocación de la primera piedra de la variante de Marín y destacó que esta infraestructura contará con una inversión de 34 millones de euros.
A su juicio, esta obra servirá para hacer frente a la crisis económica en términos de empleo, así como para reducir la accidentalidad y para dotar de más seguridad a los usuarios de la vía.
Se trata de un tramo de 4,4 kilómetros de longitud entre O Regueiriño, en Marín y Mollabao, en la parroquia pontevedresa de Lourizán --al lado del complejo de Ence--, que enlazará con la PO-12 (acceso oeste a Pontevedra) y con el ramal de acceso a la Autopista del Atlántico (AP-9).
Este segundo sector se adjudicó hace unas semanas a la empresa San José por algo más de 20 millones de euros y además de la ejecución de los 4,4 kilómetros de vía, el proyecto incluye la remodelación completa del nudo de conexión entre la autovía de Marín y la autopista, que se ejecutará en colaboración con Fomento.
