El secretario xeral del PSdeG y candidato a la reelección como presidente de la Xunta, Emilio Pérez Touriño, garantizó que, si revalida su cargo en las urnas el 1 de marzo, todos los trabajadores de todos los sectores de actividad que sufran un expediente de regulación de empleo (ERE) recibirán el 90 por ciento de su salario y cursos de formación durante el tiempo que dure el ERE.
En un encuentro con organizaciones de la costa atlántica, el dirigente socialista explicó que esta cobertura salarial parte de la mesa de diálogo social, de modo que la Xunta aportará un 13 por ciento al 70 por ciento que cubre la prestación de desempleo y las empresas sumarán el siete por ciento restante.
Para que nadie quede dañado durante la crisis, defendió, y argumentó que se trata de una medida que pretende paliar la caída en los ingresos y el consumo y pensada en la dirección de que los trabajadores no sufran las consecuencias de una crisis que no crearon. Mientras yo sea presidente, ningún trabajador cargará la crisis sobre su espalda, prometió Touriño.
El acto se desarrolló en el centro cultural de la localidad coruñesa de Camariñas, donde Touriño se reunió con más de 200 personas y se presentó como un presidente que no va a fallar a los gallegos, lo que fue recibido por aplausos y vítores de 'presidente, presidente' de los asistentes.
COSTA DA MORTE
Durante este encuentro, el líder socialista estuvo acompañado por la diputada autonómica Marisol Soneira, quien recordó que la actual Xunta puso en marcha actuaciones en la Costa da Morte por valor de más de 700 millones de euros en la comarca. Con esta base, erigió a Touriño en el principal activo de la Costa da Morte, porque apostó por ella sin cortapisas para que dejara de ser un territorio olvidado.
Por su parte, el secretario xeral del PSdeG enmarcó esta apuesta por la comarca coruñesa en su creencia en un país de igualdad, donde todos los ciudadanos tengan las mismas oportunidades y posibilidades.
Además, consideró que la Costa da Morte tiene recursos energéticos, recursos humanos, paisajes y todo lo que necesita para convertirse en emblema de Galicia y no en lo que fue durante tantos años: un territorio abandonado y de resignación, reprobó, y apuntó que las consecuencias de este olvido durante los gobiernos del PP generaron desempleo, incomunicación y emigración.
EL CAMBIO
Por otra banda, Touriño aludió a los que no quieren ver el cambio y lo definió utilizando las actuaciones del Gobierno gallego durante la pasada legislatura en la comarca de la Costa da Morte.
Así, evocó el accidente del Prestige para destacar que hoy Galicia es la comunidad más preparada para hacer frente a una catástrofe de esas características y añadió que la ría está saneada.
Del mismo modo, comparó la autopista que une Carballo y A Coruña construida por el PP con la Autovía da Costa da Morte, sin peaje, que estará finalizada en 2011. Ahí están las obras, aunque algunos no las quieran ver, reprochó, tras lo cual apuntó que los 340 millones de euros que cuesta supondrán la mayor inversión de la comunidad en una carretera.
Los que dicen que no hay cambio son los que tienen la cartera llena y pueden pagar el peaje cada día, pero los peajes son insolidarios, porque el coste sólo lo asumen los vecinos de la zona en lugar de pagarla entre todos los gallegos, explicó Touriño.
Por último, aludió al puerto de Brens, que supone la mayor inversion de todos los puertos de competencia autonómica, y que será ampliado para que constituya el motor económico de la comarca. Hay quien no lo entiende, o no lo quiere entender, pero en la economía actual la Costa da Morte necesita empresas para crear actividad y para que nuestros hijos no tengan que marchar, concluyó.
Para que nadie quede dañado durante la crisis, defendió, y argumentó que se trata de una medida que pretende paliar la caída en los ingresos y el consumo y pensada en la dirección de que los trabajadores no sufran las consecuencias de una crisis que no crearon. Mientras yo sea presidente, ningún trabajador cargará la crisis sobre su espalda, prometió Touriño.
El acto se desarrolló en el centro cultural de la localidad coruñesa de Camariñas, donde Touriño se reunió con más de 200 personas y se presentó como un presidente que no va a fallar a los gallegos, lo que fue recibido por aplausos y vítores de 'presidente, presidente' de los asistentes.
COSTA DA MORTE
Durante este encuentro, el líder socialista estuvo acompañado por la diputada autonómica Marisol Soneira, quien recordó que la actual Xunta puso en marcha actuaciones en la Costa da Morte por valor de más de 700 millones de euros en la comarca. Con esta base, erigió a Touriño en el principal activo de la Costa da Morte, porque apostó por ella sin cortapisas para que dejara de ser un territorio olvidado.
Por su parte, el secretario xeral del PSdeG enmarcó esta apuesta por la comarca coruñesa en su creencia en un país de igualdad, donde todos los ciudadanos tengan las mismas oportunidades y posibilidades.
Además, consideró que la Costa da Morte tiene recursos energéticos, recursos humanos, paisajes y todo lo que necesita para convertirse en emblema de Galicia y no en lo que fue durante tantos años: un territorio abandonado y de resignación, reprobó, y apuntó que las consecuencias de este olvido durante los gobiernos del PP generaron desempleo, incomunicación y emigración.
EL CAMBIO
Por otra banda, Touriño aludió a los que no quieren ver el cambio y lo definió utilizando las actuaciones del Gobierno gallego durante la pasada legislatura en la comarca de la Costa da Morte.
Así, evocó el accidente del Prestige para destacar que hoy Galicia es la comunidad más preparada para hacer frente a una catástrofe de esas características y añadió que la ría está saneada.
Del mismo modo, comparó la autopista que une Carballo y A Coruña construida por el PP con la Autovía da Costa da Morte, sin peaje, que estará finalizada en 2011. Ahí están las obras, aunque algunos no las quieran ver, reprochó, tras lo cual apuntó que los 340 millones de euros que cuesta supondrán la mayor inversión de la comunidad en una carretera.
Los que dicen que no hay cambio son los que tienen la cartera llena y pueden pagar el peaje cada día, pero los peajes son insolidarios, porque el coste sólo lo asumen los vecinos de la zona en lugar de pagarla entre todos los gallegos, explicó Touriño.
Por último, aludió al puerto de Brens, que supone la mayor inversion de todos los puertos de competencia autonómica, y que será ampliado para que constituya el motor económico de la comarca. Hay quien no lo entiende, o no lo quiere entender, pero en la economía actual la Costa da Morte necesita empresas para crear actividad y para que nuestros hijos no tengan que marchar, concluyó.
