El cabeza visible de Movemento Galego ao Socialismo (MGS) y responsable de Alternativas Programáticas en la Executiva del BNG, Rafael Vilar, considera que 'por ética política', lo 'coherente y lógico' es que los escindidos del BNG dejen sus actas en las instituciones en las que tengan representación institucional. 'Lo lógico es abandonar los cargos públicos a los que accedieron', manifestó.
Vilar, también concejal en Santiago de Compostela, aseguró que si él 'pasado mañana' dejase el BNG 'por respeto a la militancia' dejaría su acta de edil. Considera que se trata de una cuestión de 'ética', ya que, a su juicio, los cargos 'se deben a la organización' por la que han salido elegidos.
De esta forma, defendió que el BNG 'tiene toda la legitimidad como organización' para adoptar las decisiones que considere oportunas en el caso de que no se dejen las actas en los municipios en que haya personas que se den de baja de la formación frentista, como es el caso del Ayuntamiento de Teo en el que su regidor, Martiño Noriega, abandonará la militancia tras la decisión del Encontro Irmandiño.
Con todo, Rafael Vilar asegura que 'sólo piensa' en el 'primero' de los escenarios, es decir, en que los ediles que se den de baja del BNG también lo hagan con sus respectivas actas.
MARTIÑO NORIEGA
Por su parte, Martiño Noriega, mantiene el respaldo de seis de los otros ocho concejales que junto a él conforman el gobierno municipal para seguir adelante esta legislatura después de las elecciones del pasado mes de mayo en las que obtuvo la mayoría absoluta, con nueve actas de concejal, frente a los seis del PP, uno del PSOE y un independiente.
Por su parte, otros dos ediles -Manuel Anxo Fernández (UPG) y Carmen Diéguez (Máis Galiza)- comunicaron que acatarán la directriz que marque la dirección del BNG para los casos en los que militantes que se den de baja de la formación permanezcan con sus actas en las instituciones. Otros cinco ediles de Teo comunicaron que se darán de baja del BNG y uno más supedita su permanencia a que el Bloque permita seguir gobernando a la actual corporación en el Concello. Por su parte, Martiño Noriega abogó por mantener 'la unidad de acción'.
De esta forma, defendió que el BNG 'tiene toda la legitimidad como organización' para adoptar las decisiones que considere oportunas en el caso de que no se dejen las actas en los municipios en que haya personas que se den de baja de la formación frentista, como es el caso del Ayuntamiento de Teo en el que su regidor, Martiño Noriega, abandonará la militancia tras la decisión del Encontro Irmandiño.
Con todo, Rafael Vilar asegura que 'sólo piensa' en el 'primero' de los escenarios, es decir, en que los ediles que se den de baja del BNG también lo hagan con sus respectivas actas.
MARTIÑO NORIEGA
Por su parte, Martiño Noriega, mantiene el respaldo de seis de los otros ocho concejales que junto a él conforman el gobierno municipal para seguir adelante esta legislatura después de las elecciones del pasado mes de mayo en las que obtuvo la mayoría absoluta, con nueve actas de concejal, frente a los seis del PP, uno del PSOE y un independiente.
Por su parte, otros dos ediles -Manuel Anxo Fernández (UPG) y Carmen Diéguez (Máis Galiza)- comunicaron que acatarán la directriz que marque la dirección del BNG para los casos en los que militantes que se den de baja de la formación permanezcan con sus actas en las instituciones. Otros cinco ediles de Teo comunicaron que se darán de baja del BNG y uno más supedita su permanencia a que el Bloque permita seguir gobernando a la actual corporación en el Concello. Por su parte, Martiño Noriega abogó por mantener 'la unidad de acción'.
