El Gobierno gallego ha aprobado este jueves el inicio de la tramitación del decreto que regula la planificación de aguas, que agiliza las acciones de emergencia en caso de sequía y la limpieza de los ríos, e incorpora la exigencia de garantía por parte del gestor de 'una correcta conservación' de las infraestructuras hidráulicas para aprobar la ejecución de nuevas actuaciones.
Así, según ha explicado el presidente, Alberto Núñez Feijóo, cuando se evalúe la posibilidad de colaborar técnica y financieramente entre el Gobierno autonómico y las administraciones locales, se analizará el funcionamiento de actuaciones ejecutadas en los cinco años anteriores, que deberán estar 'en servicio y en buen estado de conservación'.
Núñez Feijóo ha destacado la importancia de este reglamento, que permitirá 'reforzar la seguridad jurídica' para la elaboración del Plan Hidrológico, al estar en la línea de lo que requieren las autoridades europeas.
La parte más extensa del decreto la ocupa, precisamente, la regulación de los instrumentos de planificación, diferenciando dos tipos según el ámbito de aplicación: la vinculada a la gestión del dominio público de la demarcación hidrográfica Galicia Costa y la vinculada a la gestión de obras, siendo en este caso toda Galicia su ámbito territorial.
Sobre el Plan Hidrológico, Feijóo ha señalado que esta norma fija aspectos 'importantes' como la obligación de incluir un registro de zonas protegidas y el 'blindaje' del régimen de caudales ecológicos en la planificación hidrológica, estableciendo cuáles son los caudales ecológicos, así como la restricción que debe respetar el plan.
PARTICIPACIÓN PÚBLICA
El reglamento apuesta por la participación pública dando más plazos de alegaciones y de información pública a los planes antes de su aprobación. Así, para el plan hidrológico se disponen tres periodos de seis meses de consulta pública; y para los de abastecimiento y saneamiento, el plan de sequía y los de gestión de riesgo de inundaciones, se fija un periodo de consulta pública de tres meses.
También se habilita al Consello de la Xunta a adoptar las medidas extraordinarias en relación con el uso del dominio público hidráulico que sean 'necesarias' ante episodios de sequía, incluso dejando claro que está implícita la declaración de utilidad pública cuando el Consello de la Xunta, con carácter extraordinario, así lo decida.
Feijóo ha defendido que, con este paso, se garantiza 'rapidez' en la toma de decisiones ante una situación de sequía.
DECLARACIÓN RESPONSABLE
En cuanto a la limpieza de los cauces de los ríos también se agilizan los trámites, toda vez que se definen, por ejemplo, como trabajos 'menores' la conservación y retirada de árboles caídos o basura, operaciones que sólo necesitarán una declaración responsable siempre que no vayan acompañadas de la modificación de los cauces.
Por último, el presidente ha destacado que este decreto reformula el Consello Sustentable da Auga, órgano consultivo en materia de aguas creado por la Lei de Augas de Galicia.
