El BNG acusó a la Xunta de consentir a la familia Franco 'incumplir' la ley al mantener cerrado el pazo de Meirás, la antigua residencia veraniega. El pazo de Meirás abrió sus puertas a la ciudadanía tras su declaración en 2008 como bien de interés cultural, lo que obligó a los herederos de Franco a permitir las visitas tras perder un recurso en el Tribunal Supremo.
No obstante, la familia Franco, que se opuso a esta apertura, logró limitar las visitas a un reducido número de estancias, así como que se impusiera la prohibición de hacer fotografías y grabaciones en el interior del inmueble. El pazo de Meirás está ubicado en el municipio coruñés de Sada y anteriormente había sido propiedad de la escritora Emilia Pardo Bazán, hasta que el pueblo gallego lo entregó a Franco tras la Guerra Civil y fue su residencia de verano durante décadas.
El Tribunal Supremo confirmó el carácter público y cultural del pazo y obligó a los propietarios a abrir sus puertas cuatro días al mes. El BNG denuncia que la Consellería de Cultura, Educación e Ordenación Universitaria no tiene intención de renovar en el presente año el convenio con la familia Franco para la apertura del pazo y, por tanto, renuncia a hacer que se cumpla la ley.
Este partido explica que así se desprende de la contestación a la pregunta parlamentaria que a petición del BNG de Sada formuló su portavoz en la Cámara autonómica, Francisco Jorquera. El BNG considera 'escandaloso' que el erario público haya pagado 53.713 euros por gastos de seguridad y de guías de visitas 'en un trato claramente preferente y discriminatorio para la familia Franco'.
Al respecto, el BNG precisa que otros bienes privados declarados de interés cultural no gozan de estas ayudas, sino que son los propietarios los que corren con los gastos derivados de la apertura a la que obliga la Ley de Patrimonio Cultural de Galicia y que son cuatro días al mes.
El Tribunal Supremo confirmó el carácter público y cultural del pazo y obligó a los propietarios a abrir sus puertas cuatro días al mes. El BNG denuncia que la Consellería de Cultura, Educación e Ordenación Universitaria no tiene intención de renovar en el presente año el convenio con la familia Franco para la apertura del pazo y, por tanto, renuncia a hacer que se cumpla la ley.
Este partido explica que así se desprende de la contestación a la pregunta parlamentaria que a petición del BNG de Sada formuló su portavoz en la Cámara autonómica, Francisco Jorquera. El BNG considera 'escandaloso' que el erario público haya pagado 53.713 euros por gastos de seguridad y de guías de visitas 'en un trato claramente preferente y discriminatorio para la familia Franco'.
Al respecto, el BNG precisa que otros bienes privados declarados de interés cultural no gozan de estas ayudas, sino que son los propietarios los que corren con los gastos derivados de la apertura a la que obliga la Ley de Patrimonio Cultural de Galicia y que son cuatro días al mes.
