La conselleira de Educación, Laura Sánchez Piñón, explicó en la Cámara autonómica que de las 178 objeciones de conciencia que su departamento recibió a la asignatura de Educación para la Ciudadanía, la práctica totalidad corresponden a alumnos de centros de titularidad privada.
En respuesta a una interpelación del PP, Sánchez Piñón indicó además que las solicitudes de objeción no están distribuidas aleatoriamente, aunque no quiso entrar en especulaciones sobre el origen de esta concentración y recordó que los padres están en su derecho de presentarlas.
En todo caso, reiteró que es obligatorio cursar la materia y advirtió de que del total de 178 objeciones --53 en A Coruña, 1 en Ourense y 124 en Pontevedra--, sólo 25 eran procedentes, ya que el resto correspondían a alumnos que no están en 2 de ESO, curso en el que se va a impartir la asignatura.
Finalmente, lamentó que el PP insista en el debate sobre Educación para la Ciudadanía y advirtió de que se trata de una visión artificial que no interesa a la población y que le hace mucho daño a la educación y a la propia formación popular, ya que sus grandes preocupaciones en la materia en los últimos años fueron esta asignatura y la guerra de las lenguas.
CRITICAS DEL PP
Previamente, la diputada popular Manuela López Besteiro preguntó a la titular de Educación si garantizaba la neutralidad de los contenidos de Educación para la Ciudadanía y por qué está parado el decreto sobre el currículo de la materia, que recibió en toda España 500 recursos judiciales y más de 100 fallos favorables.
Además, López Besteiro denunció los problemas en el arranque del curso escolar relacionados con las obras en los centros y con la carencia de profesores, algo que negó la titular de Educación, que también aprovechó para destacar los avances logrados en gratuidad de libros de texto y comedores escolares, entre otros.
La conselleira explicó que cuando comenzó el curso había nueve centros en obras sin empezar las clases, aunque a 15 de septiembre, cuatro días después, ya tenían los alumnos en clase. En cuanto a los docentes, aseguró que a día no hay ningún problema de profesorado.
En todo caso, reiteró que es obligatorio cursar la materia y advirtió de que del total de 178 objeciones --53 en A Coruña, 1 en Ourense y 124 en Pontevedra--, sólo 25 eran procedentes, ya que el resto correspondían a alumnos que no están en 2 de ESO, curso en el que se va a impartir la asignatura.
Finalmente, lamentó que el PP insista en el debate sobre Educación para la Ciudadanía y advirtió de que se trata de una visión artificial que no interesa a la población y que le hace mucho daño a la educación y a la propia formación popular, ya que sus grandes preocupaciones en la materia en los últimos años fueron esta asignatura y la guerra de las lenguas.
CRITICAS DEL PP
Previamente, la diputada popular Manuela López Besteiro preguntó a la titular de Educación si garantizaba la neutralidad de los contenidos de Educación para la Ciudadanía y por qué está parado el decreto sobre el currículo de la materia, que recibió en toda España 500 recursos judiciales y más de 100 fallos favorables.
Además, López Besteiro denunció los problemas en el arranque del curso escolar relacionados con las obras en los centros y con la carencia de profesores, algo que negó la titular de Educación, que también aprovechó para destacar los avances logrados en gratuidad de libros de texto y comedores escolares, entre otros.
La conselleira explicó que cuando comenzó el curso había nueve centros en obras sin empezar las clases, aunque a 15 de septiembre, cuatro días después, ya tenían los alumnos en clase. En cuanto a los docentes, aseguró que a día no hay ningún problema de profesorado.