Nicolás Vallejo Nágera acaba de vivir los días más felices de su vida, tras recibir el Año Nuevo junto a su hijo, Andrea Nicolás, en la casa que su familia posee en la localidad segoviana de Pedraza.
Y ahora que se ha marchado el niño, el empresario apura sus últimos días en la capital antes de regresar a Miami. Gracias al apoyo de sus amigos consigue sobrellevar mejor su tristeza por la notable ausencia de su hijo.
Desde que el pasado mes de marzo, la mexicana y el empresario siguen sin firmar el divorcio y las relaciones entre ellos han quedado restringidas a las comunicaciones entre sus abogados. Sin embargo Colate veía cumplido su sueño de poder traer a su hijo a España para disfrutar de las pasadas fiestas navideñas junto a su familia y amigos.
Durante semanas la ex pareja ha mantenido un tira y afloja, que se ha resuelto tras un pronunciamiento judicial. El fallo judicial obliga a que el hijo de la pareja sea acompañado en todo momento por una cuidadora, que pagarán a medias.
Nicolás llevaba un tiempo encerrado en el domicilio familiar por la tristeza de estar alejado de su hijo, pero a modo de distracción sus amigos han conseguido sacarle de casa para disfrutar de una agradable velada.
Entre los asistentes a la reunión se encontraba Alfonso de Borbón y María Martínez de Irujo, prima de una de sus ex novias, Eugenia Martínez de Irujo, y fueron a uno de los restaurantes más de moda de la capital.
El empresario salió a fumar un cigarro a la calle, acompañado por su amiga María. Afuera Colate se puso más serio para poner a la joven al corriente de las últimas novedades sobre su separación matrimonial. El ex marido de Paulina Rubio no paró de gesticular para aseverar todas y cada una de sus palabras. A continuación entraron en el interior para continuar disfrutando de la cena.
También Colate se marchó unos días a Pedraza para desconectar. Nicolás aprovechó el día soleado que hacía para dar un paseo en bici de lo más agradable con su hermana Samanta.
Desde que el pasado mes de marzo, la mexicana y el empresario siguen sin firmar el divorcio y las relaciones entre ellos han quedado restringidas a las comunicaciones entre sus abogados. Sin embargo Colate veía cumplido su sueño de poder traer a su hijo a España para disfrutar de las pasadas fiestas navideñas junto a su familia y amigos.
Durante semanas la ex pareja ha mantenido un tira y afloja, que se ha resuelto tras un pronunciamiento judicial. El fallo judicial obliga a que el hijo de la pareja sea acompañado en todo momento por una cuidadora, que pagarán a medias.
Nicolás llevaba un tiempo encerrado en el domicilio familiar por la tristeza de estar alejado de su hijo, pero a modo de distracción sus amigos han conseguido sacarle de casa para disfrutar de una agradable velada.
Entre los asistentes a la reunión se encontraba Alfonso de Borbón y María Martínez de Irujo, prima de una de sus ex novias, Eugenia Martínez de Irujo, y fueron a uno de los restaurantes más de moda de la capital.
El empresario salió a fumar un cigarro a la calle, acompañado por su amiga María. Afuera Colate se puso más serio para poner a la joven al corriente de las últimas novedades sobre su separación matrimonial. El ex marido de Paulina Rubio no paró de gesticular para aseverar todas y cada una de sus palabras. A continuación entraron en el interior para continuar disfrutando de la cena.
También Colate se marchó unos días a Pedraza para desconectar. Nicolás aprovechó el día soleado que hacía para dar un paseo en bici de lo más agradable con su hermana Samanta.
