Cuatro tiempos 28/11/2009

Anécdota de la industria funeraria

Hace 25 años... Tita y Heinrich anuncian su compromiso

Hace 50 años... Muere el actor francés Gerard Phillipe

Hace 75 años... Faltan electricistas para colocar luces


Para D.Ramón Otero Pedrayo

(1) Como todos sabemos, es nuestra villa, como diría usted funeraria, una verdadera fábrica donde se confeccionan, con verdadero alarde de arte, esas "cajitas" como usted dice, "última residencia de todo mortal".

Aparte de las seis o siete fábricas que existen de esta industria en nuestro suelo, existen, además, gran número de tallercitos que corresponden a otros tantos obreros que se dedican a trabajar a destajo, por lo que no es de extrañar que, a la vuelta de una esquina, se encuentre uno con una de estas "gabardinas", como los denominan los forasteros que nos visitan.Por estas razones y muchas más, estamos habituados a la presencia de tan luctuoso espectáculo y además a ver cómo en verano muchos de los obreros se meten dentro de los mismos para dormir la siesta, incluso tapados con la tapa del mismo ataúd para que las moscas no le molesten.

Pues bien.Un día de tantos del mes de agosto, un viajante de barnices, con su muestrario bajo el brazo, se decidió a visitar una de estas fábricas pero, en vez de entrar por la puerta de la oficina, lo hizo por otra que daba a la sección de guateados, donde el ataúd queda listo para su venta y exportación.Al entrar no vio a nadie.Y el hombre gritó: "¿Quién hay aquí?".No obtuvo respuesta y por ello volvió a llamar más fuerte que antes: "¿No hay nadie aquí?".La respuesta fue que uno que se hallaba tranquilo y plácidamente durmiendo en un "arca" de esas de a quince mil la unidad, levantó la tapa del ataúd y responde, medio somnoliento todavía y con voz casi quejumbrosa: "¿Qué pasaaaa...?".

Las últimas "aes" de la respuesta ya no las oyó el cuitado del viajante, con un viraje, y tirando con el muestrario, salió disparado como un cohete a reacción camino de la estación del ferrocarril para coger el primer tren que pasase para alguna parte.Lo que este buen señor pretendía era "largarse" lo antes posible de esta plaza donde sólo lo recibían los "muertos".Tanto es así que el muestrario que él había tirado lleno de terror por la "aparición" tuvo que ser facturado por el dueño de la empresa a la fábrica de barnices que el pobre hombre representaba y que, por primera vez visitaba nuestra bella Ribadavia.

Al poco tiempo tuvo necesidad de volver, porque si no trabajaba no comía.Tanto se habituó a estos "artefactos" que hoy, al igual que otro Don Juan, puede decir que "ni los muertos ni los vivos...".

Como esta anécdota, podíamos enumerar muchas más que, quizás a nuestro buen amigo Otero Pedrayo no le hagan gracia alguna, pero que a nosotros nos llena de hilaridad.

Si, don Ramón.Si nos hubiese visitado en esos días de "magosto", ese día de San Martín, que este año no hizo honor a su nombre con su verano, vería que los ataúdes, esas "caixiñas" de que usted me habla, no son todo lo tétricas que usted concibe, sino una especie de muebles diferentes a los demás y que nos sirven de último refugio.

De todos es sabido que los ribadavienses, como paradoja de nuestra fabricación, somos optimistas y alegres, y quizás por esta razón no nos paramos a pensar en esos "responsorios".Todo lo contrario, entre taza y taza de un buen tinto de este año, acompañadas por unos "aranques" ahumados, la vida nos sonríe y la "fobia" que muchas personas le tienen a los ataúdes, es borrada en nosotros por el padre vino que todo nos lo hace ver de color de rosas.

(Bouzas Cortés, 1959)


Hace 25 años... Tita y Heinrich anuncian su compromiso

28 de noviembre de 1984



-Dos septuagenarios que se conocieron en la residencia de la tercera edad de Xinzo de Limia contraen matrimonio en dicha villa.Se trata de Otilia Granja Janeiro, de Borrán (Vilar de Barrio) y Camilo Barje Colmenero, de Xinzo de Limia.

-El barón Heirinch Von Thyssen, uno de los hombres más ricos de Europa, y la española Carmen Cervera, anuncian su compromiso matrimonial en una exclusiva fiesta celebrada en un castillo de las afueras de Londres a la que asistieron, entre otros, el duque de Cádiz Alfonso de Borbón, Isabel Preysler o Eduardo de Inglaterra.

-La atleta soviética Tatiana Kanzakina, triple campeona olímpica de 800 y 1.500 metros en los Juegos Olímpicos de Montreal y Moscú, es descalificada a perpetuidad por la Federación Internacional de Atletismo por negarse a pasar un control antidoping.



Hace 50 años... Muere el actor francés Gerard Phillipe

28 de noviembre de 1959

-Don Sergio Docampo Salvado, maestro con escuela en El Cumial, se lleva las 50 pesetas de "La Región en la calle".

-(1) Artículo sobre Ribadavia.

-La Comisaría de Orense concedió pasaportes a: Leonardo Carballo Blanco, Celia Gil Parente, José Díaz Varela, Araceli Anta Sas, Angel Domínguez Quintairos, Fortunato Estévez Rodríguez, Amparo Feijóo Feijóo, Aurelio Lamas Otero, José Martínez Martínez, Sela Meije Rodríguez, José Presas Bravo, Manuel Rodríguez González y Alberto Vispo Santamaría.

-Gerad Phillipe, considerado el actor francés más popular del momento, muere a los 36 años tras sufrir un fulminante ataque al corazón.Deja películas como "Fanfán la Tulipe" o "Rojo y Negro".




Hace 75 años... Faltan electricistas para colocar luces

28 de noviembre de 1934

-Don Luis Soto, comandante militar de esta plaza, publica un escrito en el que anuncia que se alarga hasta el próximo día 10 la obligación de instalar luces en los portales de las casas debido a la escasez de obreros electricistas.

-Recuperadas 1.155,300 pesetas de las que habían sido robadas en el Banco de España de Oviedo durante los pasados disturbios.

-El pasado día 22 se casaron en Castro Caldelas el acaudalado propietario don Gerardo Méndez, vecino de San Julián, con Luisa Souto, hija del rico industrial don Juan.

-Don Paulino Rodríguez, empleado del Banco Hispano Americano, ha pedido la mano de la bella Clementina Alvarez Rodríguez, hija del ex alcalde de Orense, señor Alvarez Dopazo.


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