El flato:¿puedo evitarlo?

Seguro que la mayoría de los que hacemos ejercicio habitualmente lo hemos sufrido alguna vez. En inglés se conoce como “stitich” o “side ache”, y su nombre técnico es “Dolor Abdominal Transitorio” (DAT). Este puede definirse como una molestia aguda que aparece en la parte lateral del área central del abdomen. Es habitual que aparezca cuando realizamos actividades que implican movimientos repetitivos del torso, como al correr o nadar. ¿A qué se debe? Existen multitud de teorías que tratan de explicar este fenómeno, algunas de ellas ya han sido descartadas, como por ejemplo la isquemia diafragmática. Diversos estudios muestran la posible influencia de la actitud postural del deportista, donde una marcada actitud cifótica1 puede favorecer la aparición del flato, siendo agravado si va acompñado de un alto grado de lordosis. Actualmente, el posible origen del flato se centra en el estado postprandial, esto es, la inlfuencia de la ingesta de sólidos o líquidos antes o durante la práctica de ejercicio físico. Aquí, las bebidas hipertónicas con gran cantidad de carbohidratos presentan mayor probabilidad de desencadenarlo. Estas bebidas ralentizan el vaciado gástrico y provocan cambios en la osmolridad2 entre la cavidad peritoneal y su aporte vascular, esto genera un aumento de tensión sobre los ligamentos viscerales y podría dar lugar a un aumento en la concentración de gases, porvocando distensión abdominal y un incremento en la tensión a nivel periitoneal. De ahí que el flato suela ir acompañado de síntomas gastrointestinales. ¿Cómo prevenirlo? Debemos evitar la ingesta de sólidos y líquidos entre una y dos horas antes de realizar ejercicio. Además, es fundamental hidratarse correctamente, sin excedernos. Una vez que se ha manifestado, efectuar respiraciones profundas o emplear la respiración abdominal, puede reducir los síntomas, así como estirar la zona afectada, realizar flexiones profundas de tronco, presionar sobre la zona o aumentar la tensión de la musculatura abdominal. Debido a la importancia de la actitud postural, es importante trabajar de forma compensada la musculatura del tronco, incidir en el control escapular y en el fortalecimiento del core. Por último, en determinados casos puede ser útil la intervención de un fisioterapeuta cuando se sospeche de una excesiva tonicidad muscular que pueda incidir en la aparición del flato. En relación con esto, se ha estudiado la posible influencia de cierta musculatura como el psoa ilíaco y el cuadrado lumbar.