Elaborar un agua de colonia con siete hierbas típicas de esta época es una tradición antigua de Galicia que se celebra en San Juan
El origen de la celebración de la noche de San Juan es asociada a rituales paganos celebrados por nuestros ancestros. A pesar de que el 24 de junio se celebra el nacimiento de San Juan Bautista, la celebración de la víspera con hogueras se asocia a rituales previos al cristianismo. Concretamente, encender hogueras en estas fechas servían para celebrar el solsticio de verano y darle “fuerza” al sol, ya que a partir de esa fecha este iba perdiéndola y los días se iban haciendo más cortos.
Antiguamente, era común en Galicia elaborar un agua de colonia con hierbas típicas de esta época. El ritual consistía en recoger siete hierbas diferentes el 23 de junio y dejarlas en una cuba con agua recogida de siete fuentes, bajo el rocío de la noche de San Juan. Al día siguiente, lavarnos la cara a la mañana con el resultado, un agua de colonia con un aroma muy agradable. La creencia popular decía que este ritual servía para ahuyentar las “meigas”, el mal de ojo y la envidia. También se asociaba a la purificación y a la belleza.
Las plantas que se recogían antiguamente para llevar a cabo este ritual eran plantas comunes en Galicia como el romero, la malva o la hierbas de San Juan. Comúnmente, las más utilizadas para completar las siete y dejar elaborada la cuba con un agua de colonia perfecta eran la malva, el romero, la hierba de San Juan, el sauco, la hierbaluisa, la “xesta” o escoba rubia y el helecho (no se especificaba uno en particular). Con esta mezcla y agua recogida de siete fuentes diferentes, la gente se lavaba antiguamente la cara para completar el ritual y ahuyentar los malos espíritus. Esta relación de la noche de San Juan con el mundo de los espíritus es muy antigua y en zonas dónde no hay playa, es común realizar una queimada. Estas plantas eran las utilizadas en el ritual original, pero hay muchas otras que también se utilizaban además de que la receta se puede cambiar y adaptar a las flores de las que disponemos.
El hechizo de la queimada es un ritual cuyo origen se asocia al pueblo celta aunque estos son en verdad, desconocidos. Según algunos historiadores, se remonta al pasado de los pueblos celtas, ya que recoge varios símbolos presentes en sus rituales, pero es una teoría. Este ritual envuelve tres elementos sagrados de su cultura, el fuego, el agua y la tierra. El agua es representado por el aguardiente, la tierra por la cerámica con la que se elaboran los recipientes y el fuego por el que se utiliza para quemar la mezcla. Al igual que el ritual de las siete hierbas, este hechizo estaba orientado a expulsar a los malos espíritus y lo llevaba a cabo un druida que realizaba un conjuro. Actualmente, el ritual se mantiene similar, incluso se nombra un druida para leer un conjuro mientras se realiza.
La noche de San Juan junto con el día de San Juan son fechas muy especiales para la cultura de Galicia, son días llenos de magia que abordan las creencias de nuestros ancestros de cara a los espíritus y nos muestran la comunión que tenían estos con la naturaleza. Que sean siete hierbas y siete fuentes no es casualidad, pues el siete es un número asociado al espíritu, puesto que es la asociación entre el tres, el número sagrado y el cuatro, el número asociado a lo terrenal, el número siete pues, es la comunión entre el cielo y la tierra.
