Tres títulos autonómicos en los últimos cuatro años y varias fases de ascenso después, el Asesores Vila Castro Burgas Volei ha aceptado el reto de participar en las categorías nacionales. El conjunto ourensano ya se había ganado por derecho propio el ascenso a la Primera División, aunque no ha sido hasta esta pasada temporada cuando se ha decidido a dar el paso. Lo hizo después de un nuevo título gallego y un primer puesto en la fase de ascenso desarrollada en Torrelavega. “Cuando llegó la pandemia ya tuvimos la plaza, pero aquella situación de incertidumbre nos echó para atrás, pero este era el año de apostar y dar un paso adelante. Sabemos que es una categoría muy exigente, aunque la directiva nos animó y era el momento”, afirma Carlos Yáñez, entrenador de un equipo que esta semana inició los entrenamientos de pretemporada.
“Vamos con el tiempo justo, pero tenemos cuatro semanas de trabajo antes de comenzar la liga”, añade Yáñez. El debut, el 8 de octubre, será en territorio amigo. No por jugar como local, sino porque en tierras cántabras firmó el salto de categoría. El primer rival será el Vóley Torrelavega. La categoría, de 12 equipos, se completa con cinco madrileños (Parla, Rivas, Recuerdo, Chamartín y VP Madrid), dos astures (Gijón y Oviedo), otros tantos castellanos (Universidad de Valladolid y Soria), así como el canario Cisneros.
Para el Vila Castro Burgas, el objetivo es “lograr la permanencia en una categoría que a priori tendrá a dos equipos muy por encima del resto, el campeón Valladolid, que no aceptó la plaza de ascenso por tema económico, así como Soria, reforzado con jugadores de Superliga. Un paso por detrás, parte de los madrileños, y después seis o siete equipos peleando por evitar las dos plazas de descenso”.
El Burgas confía en la plantilla que logró el doblete, título y ascenso. Solo ha habido una baja, la del ourensano Alberto Fernández, por no poder compaginar trabajo y competición. Y dos incorporaciones, David Zuaznabar y el local Boris Trillo, que ya había estado en el equipo temporadas atrás.
Los demás, los mismos, y alguno de ellos ya había disfrutado de esta Primera con el antiguo Voley Ourense. Estos son los mimbres con los que el equipo hará historia para un club que cree en una cantera que pisa fuerte, con un equipo júnior que debe ser la base del proyecto a corto plazo.
