Cuando uno escucha la palabra Volvo se imagina calidad y seguridad. Es algo que el fabricante sueco ha sabido ganarse a pulso con sus innovaciones a lo largo de los años y gracias a ello siguen fabricando productos con unos acabados y prestaciones sensacionales.
Buena muestra de ello es el nuevo Volvo C40, el segundo modelo 100% eléctrico de la compañía (serán completamente eléctricos en menos de 900 días y apuestan por la sostenibilidad no solo en los vehículos, también en las instalaciones) y que no solo es atractivo por fuera, también lo es (y mucho) por dentro.
Lo primero que llama la atención cuando uno se acerca al C40 es su línea. El aspecto coupé de este SUV transmite fluidez y sobriedad sin renunciar a ese punto divertido que todos los coches deberían tener. Al ser un modelo eléctrico la tapa frontal sustituye a la parrilla frontal, dándole un toque diferente.
La línea lateral va cayendo lentamente para llegar a una trasera limpia, con unos faros LED que se integran perfectamente en la carrocería. Además, el techo panorámico de serie no llama la atención, pero desde dentro (otro de sus puntos fuertes), aporta amplitud.
Sentado en el Volvo, todo es comodidad. Diseño limpio, el sistema de infoentretenimiento de Google y lo mejor, una conducción precisa y estable.
La buena distribución de las baterías le dan aplomo a un vehículo que tiene 408 caballos, toda un cifra a tener en cuenta y que se nota, vaya si se nota.
Llama la atención que en una marca como Volvo, en la que prima la seguridad hayan creado un modelo tan potente, pero todo tiene una explicación. La potencia no es para circular rápido, sino para tener capacidad de maniobra en todo momento gracias a su espectacular par.
Y como no, tiene una autonomía muy buena, más de 400 kilómetros según los datos oficiales.
Eva André, gerente de Balpersa en Ourense destaca de este modelo que “este modelo está disponible en dos potencias y dos niveles de autonomía. Este modelo no pierde nada de la identidad de marca de Volvo y además gana más atributos. Tiene todo lo que caracteriza a la marca en cuanto a seguridad y confort y ahora le suma la electrificación”.
Marcos Sampedro,director comercial, añade que “el reparto de las baterías por la parte baja del vehículo no afecta a la altura de las plazas traseras y además mejora la estabilidad”.
El precio de este Volvo C40 en su versión de dos motores y 408 caballos es de 55.408 euros.
