La rehabilitación del casco histórico de Verín, iniciada en el año 2006, acaba de recibir una importante inyección de euros, exactamente 583.982, que están destinados al remozado de viviendas con una antigüedad de más de 10 años y a construir infraestructuras para mejorar la habitabilidad en el barrio.
El dinero lo aportan el Ministerio de Fomento y la Consellería de Medio Ambiente a través de un convenio firmado con el Concello verinense. El alcalde, Juan Manuel Jiménez Morán, se mostró satisfecho con la partida económica, asegurando que es 'moi imporante' porque servirá para generar empleo en el sector de la construcción. 'Na situación de crise que estamos atravesando e bo que se concedan este tipo de axudas', apuntó.
La mayor parte de los 583.982 euros será entregado en concepto de subvención a los dueños de los inmuebles que acometan obras de mejora. Las ayudas son a fondo perdido, con un límite de 10.000 euros por vivienda. Además, los interesados pueden acogerse a las subvenciones de la Xunta exclusivamente para recuperar casas situadas en espacios históricos, que giran entre 6.600 y 8.600 euros, según el tipo de obra realizada.
El único requisito es que los solicitantes deben destinar la vivienda, una vez finalizados los trabajos, como residencia habitual o alquilarla durante un período de cinco años.
Del total de la partida destinada a remozar el casco histórico, que se enmarca en el Plan Estatal de Vivienda y Rehabilitación 2006-2012, el grupo de gobierno se reserva un montante de alrededor de 100.000 euros para construir infraestructuras y realizar obras de urbanización que faciliten la habitabilidad del barrio.
Jiménez Morán animó ayer a los vecinos con inmuebles en el casco antiguo y el barrio de San Lázaro (también está incluido en el Plan de Rehabilitación) a solicitar las ayudas y remozar los inmuebles para destinarlos a viviendas. 'Polo menos, que se pasen pola Oficina de Rehabilitación a recabar información. Ós que queiran realizar obras, os técnicos municipais se encargan de facerlle o correspondente proyecto', aseguró.
TREINTA INMUEBLES
La citada oficina está en la primera planta de lo que fue en otro tiempo la plaza de Abastos. Desde el año 2006, en las instalaciones se tramitaron un total de 30 expedientes que afectaron a otros tantos inmuebles. Pero en el casco viejo aún quedan alrededor de 200 edificios por recuperar y parte de ellos pertenecen a varios propietarios (familias enteras) lo que dificulta su recuperación al no ponerse de acuerdo entre ellos, según los datos que maneja el Concello.
La mayor parte de los 583.982 euros será entregado en concepto de subvención a los dueños de los inmuebles que acometan obras de mejora. Las ayudas son a fondo perdido, con un límite de 10.000 euros por vivienda. Además, los interesados pueden acogerse a las subvenciones de la Xunta exclusivamente para recuperar casas situadas en espacios históricos, que giran entre 6.600 y 8.600 euros, según el tipo de obra realizada.
El único requisito es que los solicitantes deben destinar la vivienda, una vez finalizados los trabajos, como residencia habitual o alquilarla durante un período de cinco años.
Del total de la partida destinada a remozar el casco histórico, que se enmarca en el Plan Estatal de Vivienda y Rehabilitación 2006-2012, el grupo de gobierno se reserva un montante de alrededor de 100.000 euros para construir infraestructuras y realizar obras de urbanización que faciliten la habitabilidad del barrio.
Jiménez Morán animó ayer a los vecinos con inmuebles en el casco antiguo y el barrio de San Lázaro (también está incluido en el Plan de Rehabilitación) a solicitar las ayudas y remozar los inmuebles para destinarlos a viviendas. 'Polo menos, que se pasen pola Oficina de Rehabilitación a recabar información. Ós que queiran realizar obras, os técnicos municipais se encargan de facerlle o correspondente proyecto', aseguró.
TREINTA INMUEBLES
La citada oficina está en la primera planta de lo que fue en otro tiempo la plaza de Abastos. Desde el año 2006, en las instalaciones se tramitaron un total de 30 expedientes que afectaron a otros tantos inmuebles. Pero en el casco viejo aún quedan alrededor de 200 edificios por recuperar y parte de ellos pertenecen a varios propietarios (familias enteras) lo que dificulta su recuperación al no ponerse de acuerdo entre ellos, según los datos que maneja el Concello.
