El consistorio y la orden religiosa ultiman un acuerdo para la cesión de sus instalaciones necesarias
Pequeños flecos, fundamentalmente de caráter jurídico, faltan para que la orden de los Padres Mercedarios y el Concello de Verín ultimen de manera definitiva el acuerdo que permitirá utilizar parte de las instalaciones disponibles en pleno casco histórico de la villa como el primer museo permanente con el que contará la capital del Támega.
Ha sido el gran anuncio con el que el consistorio local quiere concluir un ejercicio donde una de sus principales motivaciones fue la potenciación del recinto viejo verinense.
Por el momento, y a la espera de que trasciendan más detalles del convenio que se suscribirá en las primeras semanas del 2017, se sabe que los padres Mercedarios cederán las dos plantas de su claustro y alguna que otra dependencia más de las amplias instalaciones que poseen desde su histórico traslado de Monterrei.
El fin que pretende el grupo de gobierno es convertir los espacios cedidos por los Mercedarios en un complejo museístico que recoja la amplia riqueza cultural, antropológica, arqueológica y hemerográfica con la que cuenta el valle de Monterrei, "un poco a imagen y semejanza de lo que es el actual Museo do Pobo Galego, en el que nos estamos inspirando", aseguró satisfecho el alcalde Gerardo Seoane, poco antes de fijar un claro objetivo para la nueva instalación de carácter municipal. "Queremos que este espacio se convierta en uno de los de referencia en el sur de Galicia. Esta comarca es riquísima en elementos propios de épocas pretéritas en sectores como el de los elementos para el cultivo, arte sacro, colecciones hemerográficas, o piezas de altísimo valor arqueológico o antropológico que en estos momentos se conservan en manos privadas pero que sabemos que no les importarían que fuesen custodiadas y expuestas en este nuevo espacio museístico".
El objetivo que persigue el Concello de Verín con la apertura de este recinto cultural no es otra que dar "cabida a todos aquellos trabajos que han sido fruto de la ingente investigación de muchos de nuestros notables convecinos, como el caso de Xesús Taboada Chivite, y que además se convierta en motor de la misma y en escaparate de los resultados que de eses trabajos puedan manar", apuntó el regidor Seoane Fidalgo. Por último, el alcalde también aseguró que existe un tercer motivo para la elección de ese lugar como sede del museo verinense, y no es otro que potenciar económicamente la zona.
PRIMEROS CONTACTOS
Gerardo Seoane afirmó que, además de la aportación que pueda realizar de manera regular el Concello de Verín desde las arcas municipales, para el mantenimiento y sostenimiento de este nuevo museo, "se han iniciado contactos también con otras instituciones, tanto públicas como privadas -de índole financiero- para que se compromentan en el sostenimiento del mismo y en la implicación en su calendario de actividades o muestras, haciéndoles saber que tendrán en Verín un espacio en el que podrán acercar su oferta cultural a todos los verinenses".
