El presidente venezolano, Hugo Chávez, ordenó hoy el cierre de la Embajada de Venezuela en Bogotá y la movilización de 10 batallones militares hacia la frontera con Colombia.
Chávez reaccionó de ese modo ante las circunstancias que rodearon lo que consideró el cobarde asesinato del portavoz internacional de las FARC, Raúl Reyes, por fuerzas militares colombianas este sábado en territorio de Ecuador, y por el que guardó un minuto de silencio.
El gobernante, que calificó a su homólogo de Colombia, Alvaro Uribe, de criminal y de dirigir un narcogobierno, dijo que las medidas de cerrar la Embajada en Bogotá y movilizar las tropas hacia la frontera son en apoyo a su homólogo de Ecuador, Rafael Correa.
Chávez explicó que recibió hoy una llamada telefónica de Correa en la que éste le informó de que llamó a su embajador en Bogotá y ordenó la movilización de tropas militares hacia el norte de ese país andino.
Señor ministro de Defensa, muévame 10 batallones hacia la frontera con Colombia de inmediato. Batallones de tanques, la Aviación militar que se despliegue, ordenó Chávez durante su programa dominical Aló Presidente.
También ordenó a su ministro de Exteriores, Nicolás Maduro, que retire de inmediato a todo el personal de la Embajada venezolana en Bogotá.
Que se vengan todos los funcionarios (diplomáticos venezolanos en Colombia). ¡Estamos en alerta y apoyaremos al Ecuador en cualquier circunstancia!, declaró el gobernante de Venezuela, país que comparte con Colombia 2.219 kilómetros de frontera terrestre.
Chávez relató que tras varias conversaciones con Correa ambos llegaron a la conclusión de que Bogotá mintió en su explicación oficial al Gobierno de Ecuador sobre las circunstancias de la muerte del segundo hombre al mando en las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y de otros 16 guerrilleros.
Ellos (funcionarios militares colombianos) reconocen incluso en su primera declaración haber invadido territorio ecuatoriano, lo cual es una cosa sumamente grave (...). ¡Esto puede ser el comienzo de una guerra en Suramérica!, alertó Chávez.
Reiteró que Colombia, a cuyo Gobierno acusa de obedecer supuestos dictámenes de Washington, pretende convertirse en el Israel de América Latina, pero advirtió a Bogotá de que los gobiernos que buscan la unión de la región no se lo permitirán.
Chávez también anunció que su Gobierno revolucionario no participará en la próxima reunión de la UNASUR prevista en Colombia, y que espera un pronunciamiento de los países de la región con respecto a las actuaciones del Gobierno de Uribe, que tildó de criminal.
Argumentó que las recientes acciones del presidente subimperialista, lacayo y mentiroso de Colombia han sido un duro golpe al proceso de integración sudamericana.
Chávez guardó un minuto de silencio, a petición de una de las participantes en su programa dominical, en honor a Raúl Reyes, a quien llamó comandante revolucionario, que conoció en el Foro de Sao Paolo celebrado en San Salvador en 1995 y con el que se reunió en tres ocasiones, dos de ellas en Venezuela, según dijo.
El gobernante, que calificó a su homólogo de Colombia, Alvaro Uribe, de criminal y de dirigir un narcogobierno, dijo que las medidas de cerrar la Embajada en Bogotá y movilizar las tropas hacia la frontera son en apoyo a su homólogo de Ecuador, Rafael Correa.
Chávez explicó que recibió hoy una llamada telefónica de Correa en la que éste le informó de que llamó a su embajador en Bogotá y ordenó la movilización de tropas militares hacia el norte de ese país andino.
Señor ministro de Defensa, muévame 10 batallones hacia la frontera con Colombia de inmediato. Batallones de tanques, la Aviación militar que se despliegue, ordenó Chávez durante su programa dominical Aló Presidente.
También ordenó a su ministro de Exteriores, Nicolás Maduro, que retire de inmediato a todo el personal de la Embajada venezolana en Bogotá.
Que se vengan todos los funcionarios (diplomáticos venezolanos en Colombia). ¡Estamos en alerta y apoyaremos al Ecuador en cualquier circunstancia!, declaró el gobernante de Venezuela, país que comparte con Colombia 2.219 kilómetros de frontera terrestre.
Chávez relató que tras varias conversaciones con Correa ambos llegaron a la conclusión de que Bogotá mintió en su explicación oficial al Gobierno de Ecuador sobre las circunstancias de la muerte del segundo hombre al mando en las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) y de otros 16 guerrilleros.
Ellos (funcionarios militares colombianos) reconocen incluso en su primera declaración haber invadido territorio ecuatoriano, lo cual es una cosa sumamente grave (...). ¡Esto puede ser el comienzo de una guerra en Suramérica!, alertó Chávez.
Reiteró que Colombia, a cuyo Gobierno acusa de obedecer supuestos dictámenes de Washington, pretende convertirse en el Israel de América Latina, pero advirtió a Bogotá de que los gobiernos que buscan la unión de la región no se lo permitirán.
Chávez también anunció que su Gobierno revolucionario no participará en la próxima reunión de la UNASUR prevista en Colombia, y que espera un pronunciamiento de los países de la región con respecto a las actuaciones del Gobierno de Uribe, que tildó de criminal.
Argumentó que las recientes acciones del presidente subimperialista, lacayo y mentiroso de Colombia han sido un duro golpe al proceso de integración sudamericana.
Chávez guardó un minuto de silencio, a petición de una de las participantes en su programa dominical, en honor a Raúl Reyes, a quien llamó comandante revolucionario, que conoció en el Foro de Sao Paolo celebrado en San Salvador en 1995 y con el que se reunió en tres ocasiones, dos de ellas en Venezuela, según dijo.