España pide al embajador israelí que su país reconsidere los asentamientos

Asentamiento judio en Cisjordania
Exteriores ha convocado hoy al embajador israelí, Alon Bar, para trasladarle la preocupación de España por las decisiones de Israel de autorizar nuevos asentamientos en Cisjordania y de retener los impuestos recaudados en nombre de la Autoridad Palestina, y le ha instado a reconsiderar su posición.
España considera que los nuevos asentamientos, si llegan a materializarse, podrían producir 'la irreversible separación de Jerusalén Este del resto de los territorios palestinos poniendo en peligro la necesaria continuidad territorial del futuro Estado palestino y la viabilidad de la solución de los dos estados', informa Exteriores en un comunicado.

Por ello, continúa la nota, ha instado al gobierno de Israel a que reconsidere su decisión.

Fuentes de la embajada de Israel en España han informado, por su parte, de la reunión que el embajador ha mantenido con el director general para el Magreb, África, Mediterráneo y Oriente Medio, Ignacio Ybáñez, que, han señalado, ha transcurrido con 'muy buen ambiente'.

Alon Bar ha recordado a Ybáñez que Israel considera que la iniciativa de Palestina para ser Estado observador de Naciones Unidas 'es una violación de los acuerdos de Oslo' y que, después de las reuniones que los diplomáticos israelíes mantuvieron con representantes del Gobierno español antes de la votación en la ONU, 'nadie debería estar sorprendido con las decisiones que está tomando' Israel, según las fuentes.

Fuentes israelíes han añadido que la embajada se enteró de que Exteriores convocaba al embajador a través de los medios de comunicación y han precisado que, en época electoral, no se puede esperar que el Gobierno de Israel no responda a la iniciativa palestina en la ONU.

España votó a favor en la ONU del reconocimiento de Palestina como Estado observador, un estatus que fue avalado por la gran mayoría de los países presentes en la Asamblea General.

En su nota, Exteriores reitera la necesidad de trabajar para un acuerdo de paz que disponga, entre otros extremos, el establecimiento de un Estado palestino sobre la base de las líneas previas a 1967 con los cambios que acuerden las partes, y con Jerusalén como capital compartida, que viva en paz y seguridad con Israel.

Para ello, insiste en que 'es urgente que las partes retomen las negociaciones'.

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