El Gobierno de Indonesia vetará el envío de trabajadores a Arabia Saudí mientras no firme un acuerdo para la protección de los inmigrantes, en respuesta a la ejecución de una mujer indonesia en este país de Oriente Medio.
El anunció fue hecho por el ministerio indonesio de Recursos Humanos después de que el pasado lunes Indonesia llamara a consulta a su embajador en Riad, la capital saudí.
La medida, precisó el ministerio, entrará el vigor el próximo 1 de agosto.
Es la primera vez que Indonesia, país exportador de mano de obra, adopta una medida de este tipo.
Cerca de 1,2 millones de indonesios trabajan en Arabia Saudí, y de este número un 70 por ciento trabajan en el servicio doméstico
La emigrante indonesia, identificada como Ruyati Saputi, fue decapitada con un sable el pasado sábado en la ciudad de la Meca, al oeste de Arabia Sadí, por matar a su patrona golpeándola en la cabeza con un cuchillo de cocina que luego le clavó en el cuello
La ejecución que, según la versión oficial de Indonesia, se llevo a cabo si previo aviso, ha desatado una ola de indignación en el país asiático.
