Representantes de la oposición dentro y fuera de Siria mostraron su optimismo sobre los resultados de la reunión que celebran en El Cairo, donde esperan alcanzar hoy una postura unificada.
'Espero que al final haya un consenso con una visión clara', dijo el dirigente de la principal agrupación en el exilio, el Consejo Nacional Sirio (CNS), Ahmed Ramadan, quien señaló que las reuniones transcurrieron con 'normalidad' durante la primera jornada.
Entre ayer y hoy, los principales grupos de la oposición siria se reúnen en la capital egipcia, bajo los auspicios de la Liga Árabe, en un intento de unificar sus filas.
'El objetivo principal es dar una oportunidad a las fuerzas que dudan en adoptar un plan sobre la caída del régimen con todos sus dirigentes, sobre todo, su cúpula', subrayó Ramadan.
El activista destacó que también se busca que la comunidad internacional adopte 'pasos urgentes' y el apoyo del Ejército Libre Sirio (ELS), el grupo armado más activo dentro de Siria, y de las fuerzas revolucionarias dentro del país.
Ayer, el ELS calificó en un comunicado de 'conspiración' el encuentro de los opositores en Egipto, porque, en su opinión, pretende salvar al régimen y demostrar que la oposición no puede ser una alternativa.
El portavoz del Consejo de Coordinación Nacional (CCN), Jalaf Dahud, cuya organización representa la oposición interna, dijo a Efe que 'hay posibilidad de llegar a un acuerdo'.
'Cualquier grupo que se desvincule ahora va a aislarse del proceso de la revolución', indicó Dahud, quien resaltó que la conferencia se ha centrado en la etapa de transición tras la caída del régimen, pero no ha tratado ni los mecanismos de lucha ni cómo se quiere acabar con él.
En cuanto la postura del ELS, Dahud apuntó que tomarán en consideración el punto de vista de los grupos armados, pero 'al final será la voz política la que decidirá sobre el futuro de Siria'.
En la conferencia, que se celebra en un hotel en las afueras de la capital, más de doscientos opositores de dentro y fuera de Siria, en presencia de varios ministros de Asuntos Exteriores árabes, analizan un 'documento de acuerdo nacional' que recoge un proyecto de transición tras la caída del régimen.
Este plan incluye puntos como la separación entre la religión y el Estado, la alternancia del poder, la igualdad de derechos para todos los ciudadanos o las libertades públicas.
Una de las cuestiones en discordia para la oposición es la propuesta planteada hace tres días en Ginebra por el Grupo de Acción para Siria de formar un Gobierno transitorio que incluya a figuras del régimen y la oposición.
Mientras que el CNS rechaza esa iniciativa, el Consejo de Coordinación Nacional (CCN), que representa a la oposición interna, pone como condición que los miembros del régimen que formen dicho gobierno no hayan cometido delitos de sangre.
Entre ayer y hoy, los principales grupos de la oposición siria se reúnen en la capital egipcia, bajo los auspicios de la Liga Árabe, en un intento de unificar sus filas.
'El objetivo principal es dar una oportunidad a las fuerzas que dudan en adoptar un plan sobre la caída del régimen con todos sus dirigentes, sobre todo, su cúpula', subrayó Ramadan.
El activista destacó que también se busca que la comunidad internacional adopte 'pasos urgentes' y el apoyo del Ejército Libre Sirio (ELS), el grupo armado más activo dentro de Siria, y de las fuerzas revolucionarias dentro del país.
Ayer, el ELS calificó en un comunicado de 'conspiración' el encuentro de los opositores en Egipto, porque, en su opinión, pretende salvar al régimen y demostrar que la oposición no puede ser una alternativa.
El portavoz del Consejo de Coordinación Nacional (CCN), Jalaf Dahud, cuya organización representa la oposición interna, dijo a Efe que 'hay posibilidad de llegar a un acuerdo'.
'Cualquier grupo que se desvincule ahora va a aislarse del proceso de la revolución', indicó Dahud, quien resaltó que la conferencia se ha centrado en la etapa de transición tras la caída del régimen, pero no ha tratado ni los mecanismos de lucha ni cómo se quiere acabar con él.
En cuanto la postura del ELS, Dahud apuntó que tomarán en consideración el punto de vista de los grupos armados, pero 'al final será la voz política la que decidirá sobre el futuro de Siria'.
En la conferencia, que se celebra en un hotel en las afueras de la capital, más de doscientos opositores de dentro y fuera de Siria, en presencia de varios ministros de Asuntos Exteriores árabes, analizan un 'documento de acuerdo nacional' que recoge un proyecto de transición tras la caída del régimen.
Este plan incluye puntos como la separación entre la religión y el Estado, la alternancia del poder, la igualdad de derechos para todos los ciudadanos o las libertades públicas.
Una de las cuestiones en discordia para la oposición es la propuesta planteada hace tres días en Ginebra por el Grupo de Acción para Siria de formar un Gobierno transitorio que incluya a figuras del régimen y la oposición.
Mientras que el CNS rechaza esa iniciativa, el Consejo de Coordinación Nacional (CCN), que representa a la oposición interna, pone como condición que los miembros del régimen que formen dicho gobierno no hayan cometido delitos de sangre.
