Haz lo que yo te diga, no lo que yo hago

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Entre la gente mayor, en su día con una cultura más religiosa que la actual, circulaba un aforismo sobre las recomendaciones que lanzaban los curas desde los púlpitos: "Haz lo que yo te diga, no lo que yo hago". Esa máxima se la podríamos aplicar también a algunos serviddores de lo público, como por ejemplo los conductores de la grúa municipal. Mientras en su tiempo de trabajo hacen frecuentes pasadas por la calle Rodríguez de la Passera, paralela al Río Barbaña, para llevarse los coches aparcados que sobrepasan la señal de no aparcar, la grúa, como se puede comprobar por la imagen, está también cometiendo una infracción. Den ejemplo, por favor, así no dan pie a que los ciudadanos se quejen de su actitud.

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