En el vertido de aguas fecales que llega al cauce del río Barbaña entre los concellos de San Cibrao y Taboadela, no solo hay heces, papel higiénico u otra clase de desperdicios que echamos por el inodoro, ahora aparecen además grandes ratas muertas, y para atestiguarlo está la fotografía adjunta. Eso sí, los vecinos pagan el saneamiento ante un atentado ecológico y contra la salud pública.