La instalación de un sistema de ahorro energético en tres entornos de Carballiño reducirá el coste anual del alumbrado público en 4.670 euros. Así lo constata el área municipal de Servizos Públicos, que dirige María José Pérez. La empresa Esinor ha empezado en estos días los trabajos, a los que se destina una inversión de 227.345 euros, que se financia con el Fondo Estatal para el Empleo y la Sostenibilidad Local.
El ahorro económico será una consecuencia de la reducción del consumo eléctrico, al que hay que añadir los beneficios ambientales con la disminución de la emisión de CO2.
ZONAS
El proyecto se ejecuta en la carretera de Ribadavia, entre el cementerio, Torrón y Señorín; un segundo tramo en esa misma zona hasta la gasolinera y, finalmente, en las calles Testeiro, Serra Martiñá, Coto Mosteiro, Peniza, Paraño, San Trocado, Pena Corneira y Serra do Faro, que son las adyacentes del margen derecho de la Avenida de Compostela, desde los Cuatro Caminos. En esta barriada se instalan 43 puntos y el ahorro energético será de 9.349 kilovatios por hora, al mismo tiempo que se reducirá en 4.780 kg la emisión de CO2.
En el entorno de la Carretera de Ribadavia se colocarán 38 puntos de luz, que supondrán 12.627 kilovatios menos y una baja de 6.443 kg de CO2.
Este sistema reducirá 'o fluxo luminoso a partir das horas de menor utilización das vías en cada un dos puntos de luz de forma independente', apuntó la concejala. El cuadro de control informático se encuentra en el Concello, desde donde se manipulan otras luminarias ya instaladas con anterioridad para el mismo fin en la villa. El sistema permite recibir de forma automática las alarmas ante cualquier avería e informes para la gestión del alumbrado público, según puntulizó María José Pérez.
El proyecto incluye la colocación de nuevas farolas y cableado subterráneo, entre otras mejoras para facilitar el ahorro.
Las autoridades municipales anunciaron que continuarán en el futuro con la implantación de este sistema en otras calles.
ZONAS
El proyecto se ejecuta en la carretera de Ribadavia, entre el cementerio, Torrón y Señorín; un segundo tramo en esa misma zona hasta la gasolinera y, finalmente, en las calles Testeiro, Serra Martiñá, Coto Mosteiro, Peniza, Paraño, San Trocado, Pena Corneira y Serra do Faro, que son las adyacentes del margen derecho de la Avenida de Compostela, desde los Cuatro Caminos. En esta barriada se instalan 43 puntos y el ahorro energético será de 9.349 kilovatios por hora, al mismo tiempo que se reducirá en 4.780 kg la emisión de CO2.
En el entorno de la Carretera de Ribadavia se colocarán 38 puntos de luz, que supondrán 12.627 kilovatios menos y una baja de 6.443 kg de CO2.
Este sistema reducirá 'o fluxo luminoso a partir das horas de menor utilización das vías en cada un dos puntos de luz de forma independente', apuntó la concejala. El cuadro de control informático se encuentra en el Concello, desde donde se manipulan otras luminarias ya instaladas con anterioridad para el mismo fin en la villa. El sistema permite recibir de forma automática las alarmas ante cualquier avería e informes para la gestión del alumbrado público, según puntulizó María José Pérez.
El proyecto incluye la colocación de nuevas farolas y cableado subterráneo, entre otras mejoras para facilitar el ahorro.
Las autoridades municipales anunciaron que continuarán en el futuro con la implantación de este sistema en otras calles.
