La comunidad cisterciense fue homenajeada por representantes del municipio costero

Oseira y Marín festejaron los 900 años de historia conjunta

La alcaldesa de Marín, María Ramallo, muestra al abad Martín la placa de homenaje. (Foto: Jainer Barros.)
Las tierras de Marín y Oseira están unidas desde el año 1112, coincidiendo con la autorización de la reina Doña Urraca al noble Diego Arias de la donación de la villa pontevedresa al cenobio cisterciense, una vez que éste se integró en la comunidad de monjes. Son 900 años (nueve siglos) de historia en común y que ayer fueron objeto de un acto de hermanamiento en el propio Monasterio de Oseira, al que asistieron sendas delegaciones de los municipios de San Cristovo de Cea y Marín, presididas por sus alcaldes, José Luis Valladares y María Ramallo.
También participó una nutrida representación (más de 150 personas) de la villa marinense, que se desplazaron hasta el Centro Multiusos de Cea y luego visitaron los hornos artesanales de la localidad, antes de continuar su peregrinaje particular hasta el monasterio. Allí fueron recibidos por el abad en funciones, Juan Javier Martín, que recibió obsequios de Concello, Autoridad Portuaria, Cofradía de Pescadores y Escuela Naval de Marín, en una de las salas capitulares.

INVESTIGACIÓN
'Bienvenidos a vuestra casa, que acoge esta visita entrañable de unos amigos que quieren rendir homenaje a nuestro pasado histórico', señaló el padre Javier. El ya abad electo del cenobio palentino de Dueñas abogó por la recuperación bibliográfica y documental del antiguo Señorío de Marín y por la implicación de las instituciones municipales en el fomento de trabajos y tesis de investigación sobre los vínculos entre el municipio pontevedrés y Oseira. Por su parte, la alcaldesa marinense, María Ramallo, destacó que 'novecientos años después, Marín es el tercer municipio en importancia de Pontevedra y sigue siendo un lugar estratégico, con un gran movimiento comercial', que el presidente de la Autoridad Portuaria, Benito Suárez, cifró en dos millones de toneladas de mercancías al año.

La comitiva marinense y sus 'hermanos' de Oseira y Cea se reunieron, al mediodía, en una comida de confraternidad en el restaurante Derby de Carballiño, para luego regresar a Oseira y asistir a unas conferencias sobre la historia de ambas comunidades. Finalmente, participaron en una oración, antes de volver a su localidad de origen.

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