El Concello realizará analíticas, acondicionará las canalizaciones y legalizará los manantiales
El Concello de Carballiño realizará un control exhaustivo de las fuentes públicas más utilizadas para el consumo del agua. Así lo anunció el alcalde, Francisco Fumega, durante la sesión extraordinaria de pleno que tuvo lugar ayer y a raíz de la aprobación por unanimidad de una moción presentada por el BNG debido al uso continuado de estos manantiales por una gran parte de la población aún a riesgo de que se encuentren contaminadas y pese a que en cada uno de ellos figura el perceptivo cartel avisando de que es agua no controlada sanitariamente.
El concejal nacionalista, Marco Reboredo, que defendió la moción, tenía en cuenta la dificultad que conlleva el control analítico debido a que los resultados pueden variar en cuestión de horas. No obstante, partía de la base de un consumo importante por parte de la población y proponía la realización de análisis cada tres meses, el acondicionamiento de las canalizaciones del agua , la legalización de las fuentes que sean de propiedad municipal ante la Confederación Hidrográfica y la aprobación de una ordenanza para regular la plantación de árboles y uso de herbicidas, entre otras actividades, en los entornos que puedan contaminar el agua.
Los concejales también aceptaban, por unanimidad, una transaccional de Alternativa Veciñal a la moción de los nacionalistas para dotar de recursos materiales y humanos al Concello para la prestación de este servicio que se propondrá compartir con otros municipios de la comarca.
En ese sentido, Fumega se comprometió a desarrollar las medidas propuestas, estudiando su cuantía, buscando un profesional para realizar las analíticas cuyos resultados se harán públicos a través de diversos medios, y a comprobar si corresponde al Concello la aprobación de la ordenanza propuesta.
Por unanimidad también se acordó dirigirse por segunda vez a la Xunta para que el nombre de Carballiño figure en el Xeodestino número 8 conjuntamente con el de Ribeiro, según la propuesta del grupo socialista y teniendo en cuenta que ambas comarcas se complementan aportando cada una distintos recursos. Por ese motivo, la Corporación también se dirigirá a los restantes concellos con el fin de que secunden la solicitud. Con la abstención del BNG, que reprochó al gobierno la convocatoria de esta sesión extraordinaria que supondrá un gasto de 2.200 euros para aprobar asuntos que podían abordarse en un pleno ordinario, se aprobó la corrección de un error en el expediente de adjudicación del servicio de ayuda a domicilio a una nueva empresa. La oposición reprochaba a los socialistas que privaticen de nuevo el servicio cuando una de sus promesas electorales era la de municipalizar aquellos que estuviesen en manos privadas.
En la misma línea, también se desarrolló el debate en torno a la aprobación de la cuenta general del 2014, demandando los grupos de la oposición que el Concello asuma la recaudación y comprometiéndose el alcalde a estudiar las posibles alternativas una vez que finalice el contrato con la actual empresa, en enero de 2016.
