El Gobierno de Asturias se interesa por el trabajo que desarrolla la Xunta de Galicia para la puesta en valor y recuperación de las tierras agrarias y en materia de gestión forestal. Con tal motivo, el director xeral da Axencia Galega de Desenvolvemento Rural (Agader), Miguel Pérez Dubois, y el de Planificación e Ordenación Forestal, José Luis Chan, mantuvieron una reunión con el director general de Planificación, Infraestructuras Agrarias y Montes del Principado de Asturias, Fernando Prendes, y con otros representantes de la Dirección General a los que explicaron como se están desarrollando figuras como el de las aldeas modelo y los proyectos piloto de los polígonos agroforestales, así como las distintas iniciativas de gestión del monte en la comunidad.
Pérez Dubois apuntó que en Galicia ya están declaradas un total de 11 aldeas modelo para poner en valor las tierras agrarias. El Gobierno gallego tiene previsto movilizar este año más de 5000 hectáreas pero calcula que la cifra ascenderá a las 10.000 hectáreas anuales con la entrada en vigor de la futura Ley de recuperación y puesta en valor de la tierra agraria de Galicia.
El director xeral de Planificación e Ordenación Forestal, José Luis Chan, informaba a los representantes del Gobierno asturiano sobre las iniciativas de la Xunta para garantizar la multifuncionalidad y sustentabilidad económica, ambiental y social del monte. Los asturianos se interesaron por las estrategias para anticiparse a los incendios mediante el impulso de especies autóctonas, especialmente de frondosas. También por el trabajo desarrollado en el marco del sector gallego de la madera, líder nacional con casi el 60% del volumen de cortas de toda España.
El encuentro concluyó con una visita a la aldea modelo de Osmo, en el municipio de Cenlle, la primera declarada por la Xunta de Galicia. Allí fueron recibidos por el alcalde, Gabriel Alén, que les mostró los avances en la limpieza.
Asentar población y frenar el abandono del medio rural
La futura Ley de recuperación e y puesta en valor de la tierra agraria de Galicia tiene como objetivo la dinamización del agro, la recuperación de la población y frenar el abandono del rural, al mismo tiempo que se trabaja en la anticipación de los incendios forestales. En la aldea modelo de Osmo están implicadas un total de 169 parcelas de 51 propietarios, que representan una superficie total de 24,77
hectáreas. Una vez puestas en valor, se dedicarán a la producción de "porco celta" y a diversos cultivos. Pérez Dubois apuntaba que esta figura, al igual que la de los polígonos agroforestales, son mecanismos voluntarios de movilización que pone en marcha la Xunta para devolver la producción a las tierras abandonadas o infrautilizadas cerca de los núcleos de población.
