El programa ‘Almorzos saudables’ ha sido implantado este curso de forma gratuita por el Concello

El colegio de Carballeda abre dos horas antes y ofrece desayunos ecológicos a 16 escolares

Los escolares desayunando cada día productos ecológicos
Dieciséis escolares de Carballeda de Avia participan en el programa ‘Almorzos saudables’ que implantó este curso el Concello de forma gratuita para que las familias trabajadoras cuenten con la garantía de que sus hijos iniciarán el día con un desayuno completo a base de productos ecológicos, además de disponer de un lugar seguro y adecuado para los chavales antes de la entrada a las clases. El servicio se ofrece de ocho a diez de la mañana y sólo le cuesta 600 euros anuales a las arcas municipales.
Facilitarle a los escolares un lugar adecuado y seguro en el que estar a primeras horas de la mañana antes de la entrada al colegio no es tarea fácil para los padres trabajadores. Si a esto añadimos las dificultades a las que se enfrentan muchas familias para inculcarles a los niños hábitos saludables con la ingestión de un completo desayuno, el comienzo de cada día se complica todavía más. Se trata de un problema bastante generalizado y que el Concello de Carballeda de Avia ha solucionado este curso con un presupuesto mínimo de 600 euros al año, implantando un servicio similar al que funciona en la ciudad de Ourense y que se denomina ‘Almorzos saudables’.

Un total de 16 escolares de Primaria adelantan cada día su entrada en el colegio Pena Corneira. Desde las ocho de la mañana y hasta las diez, una coordinadora y tres monitoras se encargan de ofrecer a los pequeños un desayuno ecológico. Los productos se adquieren en una tienda especializada de Ribadavia y en la elaboración de cada ‘almorzo’ participan los propios comensales, así como en la recogida de la mesa una vez finalizado.

Marta González y Rosa María Doval son dos madres encantadas con el nuevo servicio. Ellas dependían de sus familiares para que cuidasen de los niños hasta la hora de entrada al colegio. Rosa María Doval, apuntaba que ‘o ano pasado paseino moi mal porque a miña sogra enfermou e o meu home tuvo que perder horas no seu traballo para levar o neno á escola’.

Asimismo, ellas también reconocen que sus hijos desayunan ahora mucho mejor, ‘la fruta no la quería ni tampoco las tostadas con aceite, pero ahora con los otros niños come de todo y está muy contento’, señalaba Marta González. Y es que los chavales asisten gustosos porque después del desayuno hay un sin fin de juegos para divertirse.

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