Una comisión técnica del Consejo Regulador de la Denominación de Origen Ribeiro está elaborando las directrices que regirán durante la próxima vendimia, y que, con posterioridad, serán trasladadas al pleno de este organismo para que dé su visto bueno. Una comisión en la que están representados todos los sectores vinculados al vino, como son las bodegas, los colleiteiros y los sindicatos.
La recogida de uva prevista para finales de verano promete ser exitosa, siempre y cuando las condiciones meteorológicas se mantengan estables en estos dos últimos meses previos a la campaña. Al respecto, el presidente del Consejo Regulador, Juan Manuel Casares, señala que “en termos xerais, podemos asegurar que a colleita deste ano vai ser boa, pero aínda é demasiado cedo para facer unha estimación, xa que todo depende da evolución da uva, sempre suxeita ás inclemencias meteorolóxicas que poidan aparecer”.
Así, las expectativas son de momento optimistas, de modo que incluso se podrían superar las cifras de la campaña anterior, que rondó los 10 millones de kilos de uva, con un 93% correspondiente a uvas blancas y un 7% a tintas, destacando la treixadura en un porcentaje del 49%.
Por otra parte, el Consejo Regulador iniciará la próxima semana la puesta en marcha del plan de inspección de los viñedos amparados por la Denominación de Origen, “un plan que comezamos a levar a cabo no ano 2018 e que, dende entón, supón un primeiro achegamento ás explotacións antes das datas da vendima”, apunta Juan Manuel Casares.
Este programa supondrá la visita de unas 200 explotaciones vitícolas en toda la comarca de O Ribeiro, “co obxectivo de realizar unha estimacion dos rendementos dos viñedos en base ó estado biolóxico das prantas e ás condicións xeográficas da contorna na que se ubican”, comenta el presidente del Consejo.
