La recuperación económica que se presagiaba tras los devastadores efectos de la pandemia tendrá que esperar en algunos sectores, como ocurre con el tejido empresarial ourensano. En el año 2021 se registró el peor saldo de creación de compañías desde que el Instituto Nacional de Estadística lleva registro (2008). El curso pasado se fundaron 348 nuevas compañías, mientras que 147 bajaron la persiana de forma definitiva, lo que arroja un saldo positivo de 201, el más bajo en 14 años.
El saldo de 2020, año más duro de la pandemia, fue de 219, mientras que el más alto de la década se registró en 2016, cuando la diferencia entre aperturas y cierres fue de 330.
La decana del Colegio de Economistas de Ourense, Carmen Sampayo, calificó los datos del año pasado de “bastante desalentadores”. “Ademáis do descenso continuado no número de empresas constituidas tamén aumenta o número de empresas disoltas en Ourense”, aseguró. En 2021, la cifra de creación de empresas (348) fue la segunda más baja desde 2008, ya que solo en 2020 se fundaron menos (322). Por otro lado, el dato de cierres (147) fue el segundo más alto, superado unicamente por las 156 compañías que cesaron su actividad en 2019.
Diciembre negro
“No mes de decembro acadouse o número máis elevado de empresas disoltas: 25, cifra que non se alcanzaba desde principios de 2019”, agregó Sampayo. En el mismo mes se crearon 26 sociedades (todas ellas limitadas), por lo que el tejido empresarial de la provincia aumentó en solamente una compañía en los últimos 31 días de 2021.
Atendiendo al tipo de actividad, la decana ourensana destaca que “o comercio constitúe a actividade principal das empresas inscritas nos Rexistros Mercantís”.
El año pasado fue especialmente malo para las sociedades anónimas, ya que las 348 compañías fundadas se hicieron bajo la forma de sociedad limitada. Para encontrar la última S.A. que se registró en Ourense, hay que retraerse hasta octubre de 2020.
Tampoco fue un gran año en lo relativo al volumen monetario de las empresas, ya que, en palabras de Sampayo, “tamén se nota que o capital suscrito nas empresas constituidas tamén disminúe con respecto aos exercicios anteriores”. El capital suscrito el año pasado ascendió a 17,8 millones de euros, lo que arroja una media por compañía de 51.200 euros. En 2020, el capital total ascendió a 8,6 millones, mientras que en 2019 fue de 68 millones.
