HACIENDA - DECLARACIÓN

Un 30% de los declarantes ourensanos marca la equis a favor de la Iglesia

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photo_camera Raúl Alfonso González, delegado episcopal para Asuntos Económicos.

La Diócesis advierte que las asignaciones por el IRPF siguen bajando

Con el inicio de una nueva campaña de declaración de la renta, la Diócesis de Ourense recuerda la importancia de marcar la casilla de la Iglesia para sostener su labor pastoral y de ayuda social, desde las Cáritas parroquiales. Según recuerda el delegado episcopal para Asuntos Económicos, Raúl Alfonso González, "los datos de la última declaración, correspondientes a 2016, revelan que un 32,87% de los declarantes ourensanos marcaron la casilla de la Iglesia, un porcentaje que me parece bajo, porque más del 32% de los ourensanos piden los servicios de la Iglesia y están ayudados por ella".

En total fueron 975.763 euros, que es más que lo percibido en cantidad bruta -954.120 euros-, aunque desciende el porcentaje -que era un 34,56% en 2016-. A este dinero se une el aportado por el resto de las diócesis españolas a través de la caja común, llegando a en torno a los tres millones de euros.

Este dinero representa "el 50% del presupuesto total de la Diócesis de Ourense. La otra mitad viene por las aportaciones de los fieles a través de las limosnas o las campañas puntuales".

El porcentaje, aunque descendió el último año, "anda siempre en torno al 33 o 34%", según explica Raúl Alfonso, que señala que "las diócesis que reciben un mayor porcentaje de aportaciones, como Ciudad Real o Toledo, no llegan a superar el 51% de declarantes".

El ecónomo de la Diócesis recuerda que marcar la casilla de la Iglesia "no afecta a la declaración de la renta" y que hay un gran número de gente que hace uso de los servicios de la Iglesia en forma de bautizos, bodas, comuniones y, sobre todo, obras caritativas, "en las que se atienden a alrededor de 20.000 personas".

Por otra parte, admite que "también es cierto que en nuestra Diócesis hay un porcentaje muy elevado de cotizantes que no tienen posibilidad de asignar ese dinero a la Iglesia porque tienen rentas bajas y no hacen declaración".

En todo caso recuerda que "nuestra labor está totalmente auditada, tanto el dinero que recibimos como a qué lo dedicamos anualmente", subraya el ecónomo.

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