La junta municipal de gobierno ratifica hoy la revocación de competencias de gobierno a Aurea Soto, lo que provoca que deje de percibir las retribuciones económicas por dedicación exclusiva
El propio alcalde de la ciudad, Agustín Fernández, asumirá, con toda probabilidad, la competencia de Urbanismo que le ha revocado a la todavía concejala Aurea Soto, tras declararse la apertura de juicio oral contra ella por un supuesto delito de prevaricación, lo que la obliga, según el código ético socialista, a renunciar a sus responsabilidades de gobierno y también a su escaño. Fuentes cercanas al regidor han precisado que será Fernández el que asuma esa responsabilidad, en un momento en que el planeamiento urbanístico atraviesa un momento delicado, con un Plan en tramitación, reclamaciones patrimoniales multimillonarias por la caída del PXOM anterior y una ordenación provisional también denunciada.
Su objetivo será, con todo, cerrar el calendario de tramitación de las expropiaciones de suelo para el desarrollo termal en As Burgas, con el objetivo de que puedan iniciarse las primeras actuaciones con el nuevo mandato que surja de las elecciones municipales de mayo.
Si finalmente se confirma esta cuestión, el alcalde sumará esta competencia a las que ya acumula de Tráfico, Policía Local y Seguridad Ciudadana. Tiene pendiente la delegación de Infraestructuras y Servicios Generales, adjudicadas en su momento a Soto, que aún no ha decidido, aunque sí está claro que ninguno de los cinco concejales díscolos asumirá ninguna de las encomiendas que deja la concejala encausada, según estas mismas fuentes. Ello aparta aún más, si cabe, a los cinco críticos del núcleo duro del gobierno municipal socialista.
Precisamente, el secretario xeral del PSdeG, José Ramón Gómez Besteiro, se refirió ayer a este asunto de los concejales díscolos y la crisis permanente que se vive en el gobierno local: "Ni agudiza ni deja de agudizar. Es la respuesta clara de un partido serio y responsable", dijo, aunque precisando que el PSdeG tiene "un criterio de actuación" y que está "dando un buen ejemplo". "El código afecta a todos y se aplica de forma clara".
La junta municipal de gobierno, por cierto, ratificará hoy el decreto del alcalde, que el lunes revocó todas las competencias de Aurea Soto en el Concello, las responsabilidades en Urbanismo, Infraestructuras y Servicios Xerais, además de Contratación y Sistemas de Información. Precisamente, esto provoca que deje de percibir la dedicación exclusiva por delegación competencial, otorgada por el alcalde en octubre de 2012, exactamente 45.892,70 euros anuales brutos. También dejará de ocupar la segunda tenencia de alcaldía, la presidencia de las juntas de área de Urbanismo y Servicios Xerais y la presidencia de la comisión de pleno.
