El PP ganó sin mayorías absolutas en Ourense, Lobeira y A Rúa, el PSOE en Ribadavia y Vilamartín, mientras el BNG en Maceda

Las alcaldías de ocho municipios dependen de pactos entre partidos

La negociación a dos bandas cuando no a tres, como en el caso de A Rúa, volverá a ser el perejil que aderece la política municipal en ocho concellos en los que los partidos más votados no consiguieron la mayoría absoluta necesaria para ir por libre.
El PP se enfrenta a un escenario bien distinto al de hace cuatro años, cuando las mayorías relativas le hicieron perder, en un primer momento, 14 alcaldías (fueron 15 pero en Pontedeva consiguió gobernar en minoría). En esta etapa que ahora comienza, las mayorías simples ponen en juego las alcaldías de Ourense, A Rúa y Lobeira -donde se rompe una mayoría absoluta que Emilio Higuero ostentaba desde hacía décadas- mientras que el bastón de mando está garantizado en 65 concellos, donde los populares podrán gobernar sin apuro ni dependiendo de pactos.

El PSOE -partido que ganó con mayorías absolutas en 13 municipios- deja a expensas de futuras negociaciones las alcaldías de Ribadavia (en este caso con el BNG para reeditar el bipartido de hace cuatro años) y Vilamartín , concello en el que la llave la tendrá Alternativa Popular Galega.

Los socialistas suben en porcentaje de votos: de un 27,44% a un 28,48%, aunque bajan en número de concejales, con 23 menos con respecto a 2007. Pero es el PP el que ha obtenido los mejores resultados en la provincia, mejorando notablemente con respecto a 2007

Mientras, el BNG gobernará en más ayuntamientos por las cinco mayorías absolutas conseguidas si bien en Maceda el alcalde nacionalista deberá pactar con el PSOE.

No obstante, la formación frentista consigue 23 ediles menos con respecto a 2007, ya que el porcentaje de votos baja de un 18,81% a un 14,27%.

Te puede interesar