Fundada en 1905, se mantuvo en activo hasta 2013 y tuvo delegaciones en Lugo, Vigo y Vilagarcía
La lámina que entrega hoy La Región dentro de la colección Publicidad con historia recoge el anuncio de una empresa que llegó a superar el siglo de actividad en la ciudad, que se ramificó por Galicia y que hace poco más de un año tuvo que cerrar arrastrada por la enorme crisis que sufrió y sufre el sector de la construcción. Se trata de la firma Almacenes Reverter, que en 1963, fecha de la publicación del anuncio, se denominaba Hijos de Estanislao Reverter y se publicitaba como concesionaria para Ourense y Vigo de prestigiosas firmas de cementos, fibrocementos, productos químicos para la construcción y muebles metálicos.
En ese momento la empresa ya tenía 58 años de vida. Había sido fundada en 1905 por Estanislao Reverter, un catalán que llegó a Ourense en 1903, llamado para construir la chimenea de la térmica de Los Remedios. "Era una construcción de ladrillo, con mucha altura y él dominaba una técnica que aquí se desconocía", recuerda su nieto, Antonio Reverter, que llevó las riendas de la empresa hasta el último momento.
Estanislao se trajo con él a dos hermanos, que luego se asentaron en Vilagarcía, construyendo todos chimeneas de tiro para hornos. Estanislado se asienta en Ourense y en 1905 abre su primer almacén de construcción, en el número 137 de la calle del Progreso. Comenzó con materiales de construcción como ladrillo, cemento o cal y en 1915 dio otro paso, situando en el edificio de enfrente una sección de sanitarios. "Fue uno de los pioneros en la comercialización de sanitarios", señala Antonio Reverter.
Fue prosperando, remodeló y amplió los edificio en los que se ubicaba y el momento de su gran expansión fue 1977, cuando la empresa se convirtió en sociedad anónima y abrió sucursales en Vigo y Vilagarcía.Almacenes Reverter llegó a contar con seis establecimientos comerciales, desarrollando su actividad en las provincias de Ourense, Lugo y Pontevedra. Tres de ellos estaban en Ourense: la sede central de la calle del Progreso, un almacén de materiales de construcción en el polígono industrial de San Cibrao das Viñas -que inauguró en la década de los años 90- y una sección de Reverter Mundobaño en la calle Río Arnoia. También gestionó establecimientos comerciales en Lugo, Vigo y Vilagarcía de Arousa.
La crisis económica, que se cebó especialmente en el sector de la construcción, "fue tan tremenda que la empresa no pudo aguantar", señala Antonio Reverter, y en 2013 cerraba sus puertas.
