El autor del robo forzó la cerradura de un vehículo estacionado en la calle Río Navea para hacerse con los dos aparatos electrónicos
Orencio F.S., un conocido de las fuerzas de seguridad por delitos contra la propiedad, aceptó ayer un año de cárcel por la sustracción de un teléfono móvil y un equipo de música en el interior de un vehículo. Para ello, forzó la cerradura de la puerta delantera izquierda del vehículo, que su conductora habitual había dejado correctamente estacionado y cerrado en la calle Río Navea de la ciudad. Mientras que los objetos sustraídos el 5 de octubre de 2014 estaban valorados en 250 euros, los daños causados en el vehículo fueron peritados en 597,85 euros.
El fiscal pedía inicialmente una pena de tres años pero la rebajó porque era consumidor habitual de droga.
