El Archivo Diocesano inició el mes de junio reabriendo con normalidad a diario y con el horario habitual. Para ello, la Diócesis ha vuelvo a contratar a la persona que durante una veintena de años ha desempeñado las labores de archivero y cuyo puesto de trabajo se había visto afectado por el expediente de despido colectivo aplicado en la Diputación provincial -institución que por convenio pagaba al trabajador del recinto-.
Así lo confirmaba el canónigo archivero, Miguel Ángel González, que ha estado acompañando al empleado durante lo que va de mes. 'Estamos todavía ultimando el contrato, pero él ya trabaja porque legalmente puede hacerlo' mientras la Diócesis concluye el papeleo. De este modo, el Diocesano ha podido celebrar con casi total normalidad el Día de los Archivos. Aunque la fecha propia es el 9 de junio, la celebración se adelantó para no coincidir en domingo. Miguel Ángel González aprovechó la efemérides para 'lamentar que son lugares muy consultados y hacia los que no existe mucha sensibilización'.
Y mientras la normalidad vuelve a tomar posiciones en el registro situado en el Seminario, el Archivo Histórico Provincial realizaba visitas guiadas para explicar su funcionamiento y la dimensión de sus fondos documentales. En esta ocasión, la fe pública y la documentación generada por escribanos y notarios en toda la historia de Ourense centró las actividades de la jornada.
TRASLADO A SAN FRANCISCO
Un año más, los papeles del Archivo Histórico esperaron por los visitantes en la parte del Pazo Episcopal que ocupan desde el año 1964. En el futuro, la institución será trasladada al conjunto monumental de San Francisco, donde compartirá espacio con la biblioteca. Sin embargo, la duración de las obras y la dificultad del propio traslado de los documentos retrasará un par de años la mudanza.
Y mientras la normalidad vuelve a tomar posiciones en el registro situado en el Seminario, el Archivo Histórico Provincial realizaba visitas guiadas para explicar su funcionamiento y la dimensión de sus fondos documentales. En esta ocasión, la fe pública y la documentación generada por escribanos y notarios en toda la historia de Ourense centró las actividades de la jornada.
TRASLADO A SAN FRANCISCO
Un año más, los papeles del Archivo Histórico esperaron por los visitantes en la parte del Pazo Episcopal que ocupan desde el año 1964. En el futuro, la institución será trasladada al conjunto monumental de San Francisco, donde compartirá espacio con la biblioteca. Sin embargo, la duración de las obras y la dificultad del propio traslado de los documentos retrasará un par de años la mudanza.
