La publicación en el Diario Oficial de Galicia (DOG) del proyecto de expropiación de los bienes y derechos incluidos en el área de reparto de As Burgas, donde el gobierno local socialista pretende impulsar el termalismo, ha reactivado esta iniciativa municipal, que ocasionará, con toda probabilidad, múltiples alegaciones y posiblemente litigios en el ámbito contencioso administrativo, al haberse manifestado ya los propietarios de las parcelas contra la expropiación de sus bienes.
Ahí se incluye también la vieja cárcel de Ourense, en estado de absoluto abandono y muy afectada por la sucesión de las últimas lluvias y temporales, hasta convertirla en un edificio absolutamente ruinoso, ofreciendo la imagen de una fachada absolutamente deteriorada y cubierta de musgo y moho. Precisamente, en una de sus ventanas, aparecía el martes un cartel de 'se alquila', posteriormente retirado por responsables del Concello, como una irónica crítica al estado de abandono del edificio.
La concejala de Urbanismo, Aurea Soto, precisaba ayer que existe ahora un mes de plazo para que los afectados aleguen y después, cuando se contesten esas reclamaciones, el Concello podrá hacer ya uso de los terrenos, independientemente de que sus reivindicaciones continúen en los juzgados. Será también entonces cuando pueda sacar a concurso la concesión del gran hotel balneario y un aparcamiento en la zona, aunque este último deberá adentrarse en el área de la Praza de Abastos porque la Confederación Hidrográfica restringió su espacio al lado del Barbaña en la línea de la avenida de los cien años.
Soto señaló ayer que, independientemente de la salida a concurso de la gestión de la vieja cárcel, los Baños de Outeiro y el solar de Xardín das Burgas, los técnicos trabajan ya en la redacción del pliego de condiciones que ha de regir esa concesión, para la que hay, asegura, empresas especializadas interesadas, sobre todo desde el viaje a México del alcalde, Agustín Fernández, que promocionó los proyectos termales de la ciudad en su visita a la ciudad hermana Tlanelpantla de Baz.
Por lo que se refiere al proceso de expropiación de los terrenos y bienes, cabe destacar que se trata de nueve parcelas las que se ven afectadas por la medida, en la que el Concello pretende gastar inicialmente -otra cosa será que se estimen parte de las alegaciones o se pierda el proceso en los posibles pleitos- 1.050.000 euros. Do de las parcelas, que suman cerca de 3.000 metros cuadrados, pertenecen a Xardín das Burgas y pretende pagarle 389.000 euros; otras tres, que suman 512 metros cuadrados, a Roberto Francisco Trapote (dos de ellas con María Teresa Sanmartín), a los que proyecta pagarles cerca de 70.000 euros; otras dos, de herederos de varios propietarios, alcanzan los 230 metros cuadrados, y suman ambas un precio inicial de 31.700 euros; y otras dos pertenecen a la familia Santamarina Arias (propietarios del antiguo balneario de Baños de Outeiro); superan los 1.500 metros cuadrados y el precio se acerca a los 513.000 euros.
La concejala de Urbanismo, Aurea Soto, precisaba ayer que existe ahora un mes de plazo para que los afectados aleguen y después, cuando se contesten esas reclamaciones, el Concello podrá hacer ya uso de los terrenos, independientemente de que sus reivindicaciones continúen en los juzgados. Será también entonces cuando pueda sacar a concurso la concesión del gran hotel balneario y un aparcamiento en la zona, aunque este último deberá adentrarse en el área de la Praza de Abastos porque la Confederación Hidrográfica restringió su espacio al lado del Barbaña en la línea de la avenida de los cien años.
Soto señaló ayer que, independientemente de la salida a concurso de la gestión de la vieja cárcel, los Baños de Outeiro y el solar de Xardín das Burgas, los técnicos trabajan ya en la redacción del pliego de condiciones que ha de regir esa concesión, para la que hay, asegura, empresas especializadas interesadas, sobre todo desde el viaje a México del alcalde, Agustín Fernández, que promocionó los proyectos termales de la ciudad en su visita a la ciudad hermana Tlanelpantla de Baz.
Por lo que se refiere al proceso de expropiación de los terrenos y bienes, cabe destacar que se trata de nueve parcelas las que se ven afectadas por la medida, en la que el Concello pretende gastar inicialmente -otra cosa será que se estimen parte de las alegaciones o se pierda el proceso en los posibles pleitos- 1.050.000 euros. Do de las parcelas, que suman cerca de 3.000 metros cuadrados, pertenecen a Xardín das Burgas y pretende pagarle 389.000 euros; otras tres, que suman 512 metros cuadrados, a Roberto Francisco Trapote (dos de ellas con María Teresa Sanmartín), a los que proyecta pagarles cerca de 70.000 euros; otras dos, de herederos de varios propietarios, alcanzan los 230 metros cuadrados, y suman ambas un precio inicial de 31.700 euros; y otras dos pertenecen a la familia Santamarina Arias (propietarios del antiguo balneario de Baños de Outeiro); superan los 1.500 metros cuadrados y el precio se acerca a los 513.000 euros.
