Los ladrones entraron en la madrugada de ayer en el Colegio Oficial de Economistas de Ourense, situado en el número 30 de la avenida de la Habana, y sustrajeron un ordenador portátil, en el que había abundante documentación de los asociados.
Los asaltantes entraron en el local, en un primer piso, forzando la cerradura tras abrir con un hierro una grieta en la puerta. Una vez en el interior, se apoderaron del portátil que, según el presidente del colectivo, Ángel Pascual, contenía bastante documentación, pero sin ser importante.
Un vecino del inmueble fue el que se percató del asalto al encontrarse con la puerta abierta y la cerradura destrozada. Al lugar acudió una patrulla de la Policía Científica, que realizó una inspección ocular en las instalaciones con el objetivo de encontrar pruebas que permitan identificar a los autores. Mientras, Ángel Pascual avisaba de la situación a los economistas colegiados, unos 150, para que se personaran en las instalaciones y revisaran su documentación por si echaban en falta algo más que el ordenador portátil que fue sustraído.
El presidente del colectivo no se explicaba ayer el robo, máxime cuando en el local 'no suele haber dinero ni objetos de valor', apuntó, recalcando que el robo puede ser obra de cualquier ratero. 'Ahora mismo no desconfiamos de nadie', añadió.
INVESTIGACIÓN
La Policía Nacional abrió una investigación y en la tarde de ayer interrogaba a los vecinos del inmueble por si su testimonio podía arrojar luz en el esclarecimiento del robo.
Los vecinos, según fuentes de la investigación, apenas se enteraron del asalto y los agentes revisaban las cámaras de seguridad que hay en dos negocios cercanos por si habían recogido algún movimiento extraño en la entrada del citado colegio.
Un vecino del inmueble fue el que se percató del asalto al encontrarse con la puerta abierta y la cerradura destrozada. Al lugar acudió una patrulla de la Policía Científica, que realizó una inspección ocular en las instalaciones con el objetivo de encontrar pruebas que permitan identificar a los autores. Mientras, Ángel Pascual avisaba de la situación a los economistas colegiados, unos 150, para que se personaran en las instalaciones y revisaran su documentación por si echaban en falta algo más que el ordenador portátil que fue sustraído.
El presidente del colectivo no se explicaba ayer el robo, máxime cuando en el local 'no suele haber dinero ni objetos de valor', apuntó, recalcando que el robo puede ser obra de cualquier ratero. 'Ahora mismo no desconfiamos de nadie', añadió.
INVESTIGACIÓN
La Policía Nacional abrió una investigación y en la tarde de ayer interrogaba a los vecinos del inmueble por si su testimonio podía arrojar luz en el esclarecimiento del robo.
Los vecinos, según fuentes de la investigación, apenas se enteraron del asalto y los agentes revisaban las cámaras de seguridad que hay en dos negocios cercanos por si habían recogido algún movimiento extraño en la entrada del citado colegio.
