Casi una decena de asociaciones atienden las necesidades y abren expectativas laborales a los disminuidos físicos y psíquicos de la provincia, atendiendo diariamente a sus cerca de dos mil socios, además de generar varios centenares de empleos, y todo ello, superando un momento de crisis económica que también está pasando factura a estas asociaciones. 'Mantémonos axustándonos moito. Non sabemos que vai pasar', señala Alfonso Díaz Lage, presidente de Morea (Asociación de Familiares y Enfermos Mentales con sede en Ourense y delegaciones en O Barco, Verín y Lalín, en la vecina Pontevedra). La asociación cuenta con 400 socios (20
'Mantémonos axustándonos moito. Non sabemos que vai pasar', señala Alfonso Díaz Lage, presidente de Morea (Asociación de Familiares y Enfermos Mentales con sede en Ourense y delegaciones en O Barco, Verín y Lalín, en la vecina Pontevedra). La asociación cuenta con 400 socios (20 de ellos en O Barco) y se sufraga fundamentalmente con ayudas de la Xunta. 'Éstas no aumentan y los impuestos no hacen más que subir, así que hemos tenido que reducir la plantilla de los centros', reconoce Díaz Lage.
En Ourense, Aixiña, una de las asociaciones con más años trabajando con minusválidos físicos, puede presumir de que de su presupuesto aproximado de 300.000 euros (162.313 más lo correspondiente al gasto corriente), 'un 80 por ciento se autofinancia y el 20 por ciento restante es aportado por las administraciones públicas', señala Elisa Rodríguez, que pone sin embargo el acento en que 'el incremento de los carburantes es elevadísimo y si sigue así todos pasaremos problemas'.
Josefa Rodríguez, presidenta de Aspadisi (Asociación de padres de discapacitados psíquicos de Carballiño) aseguró que si ahora proyecta construir una tercera planta del centro ocupacional es porque 'a residencia é moi necesaria, porque os pais facémonos maiores ou xa non están e os rapaces terían un sitio onde vivir'. La presidenta de Aspadisi aseguró que para el centro ocupacional sigue aumentando la demanda de plazas, 'incluso temos catro rapaces que son de Ribadavia, solicitamos o concerto de prazas según as necesidades das familias para que non teñan que ir ata Vigo ou Ourense'.
Esa ampliación del centro es en estos momentos un proyecto que espera la ayuda institucional.
Y es precisamente esa reducción del apoyo económico por parte de las instituciones el que se ha traducido 'en un descenso de usuarios (de 31 en 2012 a 26 en 2013) y de socios (de 45 en 2012 a 40 en el 2013)', según señalan desde la Asociación de Personas con Discapacidad de Ourense (ADO).
'En el último año hemos sufrido una reducción de las ayudas públicas de entre el 10 y el 15 por ciento de media (del 2011 y el 2012, puesto que no se han producido convocatorias ni concesiones en 2013). Debido a esto se ha tenido que realizar un ajuste en las cuotas de los usuarios, con un incremento de en torno al 15%', añaden desde ADO. Toca apretarse el cinturón y las asociaciones intentan, de momento, no tocar servicios.
En Ourense, Aixiña, una de las asociaciones con más años trabajando con minusválidos físicos, puede presumir de que de su presupuesto aproximado de 300.000 euros (162.313 más lo correspondiente al gasto corriente), 'un 80 por ciento se autofinancia y el 20 por ciento restante es aportado por las administraciones públicas', señala Elisa Rodríguez, que pone sin embargo el acento en que 'el incremento de los carburantes es elevadísimo y si sigue así todos pasaremos problemas'.
Josefa Rodríguez, presidenta de Aspadisi (Asociación de padres de discapacitados psíquicos de Carballiño) aseguró que si ahora proyecta construir una tercera planta del centro ocupacional es porque 'a residencia é moi necesaria, porque os pais facémonos maiores ou xa non están e os rapaces terían un sitio onde vivir'. La presidenta de Aspadisi aseguró que para el centro ocupacional sigue aumentando la demanda de plazas, 'incluso temos catro rapaces que son de Ribadavia, solicitamos o concerto de prazas según as necesidades das familias para que non teñan que ir ata Vigo ou Ourense'.
Esa ampliación del centro es en estos momentos un proyecto que espera la ayuda institucional.
Y es precisamente esa reducción del apoyo económico por parte de las instituciones el que se ha traducido 'en un descenso de usuarios (de 31 en 2012 a 26 en 2013) y de socios (de 45 en 2012 a 40 en el 2013)', según señalan desde la Asociación de Personas con Discapacidad de Ourense (ADO).
'En el último año hemos sufrido una reducción de las ayudas públicas de entre el 10 y el 15 por ciento de media (del 2011 y el 2012, puesto que no se han producido convocatorias ni concesiones en 2013). Debido a esto se ha tenido que realizar un ajuste en las cuotas de los usuarios, con un incremento de en torno al 15%', añaden desde ADO. Toca apretarse el cinturón y las asociaciones intentan, de momento, no tocar servicios.
