El inculpado aprovechó el turno de última palabra para declarar su honorabilidad y prestigio
La Asociación de pais a favor das persoas con retraso mental de Ourense (Aspanas) dejó los ocho años de prisión que pedía inocialmente para el que fuera gerente de la entidad, Juan José Rodríguez, en dos, adhiriéndose a la petición de condena de la fiscal por delito societario, además de nueve meses multa (a seis euros al día) y una indemnización por los 80.474 euros que interesa el BBVA así como las cantidades que reclame el Banco Popular. Alternativamente, las acusaciones plantean un año de cárcel por administración desleal (castiga los excesos que provocan perjuicios a la hora de administrar un patrimonio ajeno).
Las acusaciones sustentan sus peticiones de pena en arriesgadas operaciones financieras comandadas por el que fuera gerente durante 11 años sin conocimiento de la junta directiva que asumió las directrices de asociación en febrero de 2013. La más controvertida, un contrato de factoring con el BBVA , a favor de Aspanas Termal, por importe de 166.887 euros como anticipo de una subvención de la Xunta para costear cuando esta ya había sido cobrada. También aluden a una depósito de 100.000 euros en el Banco Popular y de su posterior pignoración a favor de Aspanas Termal hasta el 2020 en una cuenta de la que él era el único autorizado. No obstante, la defensa argumenta que esta última se hizo bajo el mandato y conocimiento de la anterior directiva en enero de 2013. Según resaltó su letrado, la operación estaba vinculada a la concesión de un préstamo a Aspanas Termal por parte del Popular por importe de 500.000 euros, avalado en un 75% por el Igape y por el cual Aspanas Termal le pudo devolver a la entidad matriz 302.000 euros.
La defensa argumenta que el inculpado actuó conforme al poder otorgado en febrero de 2012 que le confería amplias facultades para suscribir en nombre de la asociación toda clase de contratos y operaciones bancarias. "No tenía impuesta por la junta directiva la obligación de poner en su conocimiento cada uno de las operaciones", dice su letrado.
Juan José Rodríguez aprovechó el turno de última palabra para, en un extenso alegato, defender la "honorabilidad y dignidad" en sus cometidos como gestor, con un detallado repaso de sus logros en Aspanas desde que entró en el año 2002 hasta que en enero de 2014 le fue rescindido el contrato.
